viernes, 22 de diciembre de 2017

FELICES FIESTAS

Estimados Amigos y Conocidos
Estamos frente a un nuevo año, procuremos que sea más que un cambio de año, espero fervientemente que el año que comienza, lo principal que cambie sea el hombre, que abandone el individualismo como cultura y las ambiciones materiales como religión, que la solidaridad y la justicia social marquen el camino a un cambio. 
Expulsemos para siempre todos los malos sentimientos de nuestro corazón y velemos siempre por el bienestar de los demás, esa es la forma correcta de recibir al Niño Dios hoy en Navidad. Felices Fiestas para todos.
Mucha suerte para el año que viene y que la pasen lo mejor posible. 
Les deseo muchas felicidades para toda su familia.
Le envío un fuerte abrazo.

jueves, 7 de diciembre de 2017

SOCIEDAD DESQUISIADA

Nuestra sociedad está atravesada por el egoísmo, envidia, el individualismo y la falta de solidaridad. El mundo de cada individuo pasa solo por lo que le ocurre a él, no se detiene a ver que le sucede al otro. Su mundo es tan solo su núcleo y lo demás no existe.
Desde donde escribo: como la mayoría me forme en una casa de trabajadores, mi padre Pedro (Perico - pocero) y mi madre Ines (modista) trabajaban incansablemente para vivir lo más dignamente posible y darme la mejor educación, esa que no pudieron tener ellos. Nunca sobro el dinero, por el contrario en ocasiones escaseaba, pero nunca me lo demostraron, lo que sobraba era sacrificio, honestidad, solidaridad, compañerismo y calidez humana a servicio de los demás. Me enseñaron una cantidad de valores y condición humana que me formaron para la vida y de lo cual estoy eternamente agradecido. Mis logros educativos (un profesional), seguramente no es el que quisieron mis padres, fue la básica y común. Pero mi inquietud fue interesarme más allá de lo que me enseñaban. Como dice Litto Nebbia en su canción “Quien quiere oír que oiga”: "Si la historia la escriben los que ganan, quiere decir que hay otra historia", yo me atreví a hondar en la otra historia. Leí a todos, de un lado y otro, estuve en cada hecho trascendente del País, para que nadie me contara que pasaba, participé donde creía que debía estar, y de cada caso saque mis conclusiones y de ellas, es lo que soy: Tengo fuertes convicciones, pero no pretendo influenciar a nadie ni pretendo que los demás piensen como yo. Tengo infinidad de defectos, no creo que mi verdad sea la verdad absoluta, respeto la verdad de los demás aunque no concuerde con ellas, pero también quiero que me respeten la mía. Nunca maneje mis convicciones por mi situación personal, siempre priorice el nosotros al yo. En definitiva me catalogo como un contra poder, un políticamente incorrecto, aunque en ocasiones ando con la manada, no me siento parte de ella. Soy crítico con los que piensan igual o parecido a mí. Con discursos no me convencen sino con las realizaciones. Nunca pensé en mi bienestar sino en el del conjunto. Se dice que en la medida que envejecemos no hacemos más conservadores, bueno yo cada día me siento más anarquizado, porque esta democracia representativa no me representa. No creo en la justicia porque sólo privilegia al rico y poderoso, y se allana ante el poder de turno, esto no es justicia. No creo en los medios, ellos están manejados por el “poder” y te arrean hacia donde ellos quieren.
Un sector de esta sociedad esta desquiciada. Viven al calor de los poderosos, lo defienden y apoyan aunque a ellos solo les toque unas migajas de la porción de la torta, que les permite vivir con una circunstancial comodidad económica y a ello se aferran. Su convicción es la conveniencia. Repiten el mensaje de los poderosos y se sienten satisfechos al ser parte de la manada. Juzgan con suficiencia aquellos que piensan diferente, desde una eventual moralidad y ética que les ha sido grabado a fuego por años, pero no se atreven o se niegan inconscientemente hacer la autocritica de su comportamiento. Para este sector no son dignos aquellos que reclaman una mejor distribución de la riqueza, igualdad de oportunidad y condiciones. Desde que nacieron fueron educados para tener un pensamiento hegemónico, que el poder impone, pero jamás se atrevieron a tener la rebeldía de pensar diferente, de salirse del rebaño y sentirse libres. Lamen el zapato que los golpea. Viven aferrados al pequeño islote de poder que les consienten, pero no se dan cuenta que, poco a poco, son empujados al agua y que nadie les va a tirar un salvavidas el día que pierdan pie. Lo disimulan, pero tienen rencor y odio social, menosprecian y condenan a los marginales y pobres, acusándolos que su condición es por culpa de ellos y no de las políticas y el egoísmo social.
Así sucede con la reforma jubilatoria; No existe empatía con el despojado, no registra la angustia y la desesperación que padece aquel que solo vive de su jubilación y que no le alcanza para satisfacer sus necesidades básicas, que son la mayoría. Si hubiera un rechazo generalizado de la sociedad, no llegaría aplicarse. http://lzrsocialypopular.blogspot.com.ar/2017/12/el-imperio-del-cinismo-reforma.html.
Para ellos los únicos reclamos valederos son los de ese sector social (marcha contra el corralito, cacerolaso, pedido por ganancia, los cortes de ruta por el conflicto de la 125). Son intolerantes sociales, privilegian sobre todo sus intereses y no registran las necesidades de quienes reclaman. Critican al despojado (la víctima) y justifican al apropiador (el victimario). Ante un reclamo social, piden represión desembozadamente, su prioridad es transitar que el reclamo por justicia, trabajo o comida. Valoran los muertos según el nivel social. Hay muertos de primera y de segunda. No es la misma reacción o tratamiento ante un muerto en occidente (Francia, EE.UU., Alemania, Inglaterra) que cientos de muertos en oriente (Paquistan, Siria, Egipto).
No reconocen sus raíces, porque han sido colonizados culturalmente. Rechazan a los inmigrantes, principalmente latinoamericanos, cuando sus antepasados bajaron de los barcos escapando de las guerras o hambruna. Incluso ahora también desprecian aquellos que vivían en estas tierras antes que desembarcaran los conquistadores. Defienden a extranjeros que “compran” miles de hectáreas para explotar y aislar, que a aquellos ciudadanos de los pueblos originarios que reclaman una pequeña porción de tierra, que ocupan hace miles de años, para subsistir. 
Este sector de la sociedad, si vivieran en la época de Jesucristo, serian como los fariseos (Jesús le dice: “Mira, ustedes, los fariseos, limpian por fuera la copa y el plato, pero por dentro están llenos de codicia y maldad.” (Lucas 11:39, 40)., los que le arrojarían piedras, pidieran su crucifixión, lo marcarían como subversivo, y cuando lo condenan sin un juicio justo, habrían dicho “en algo andaría o algo habrá hecho”.
"Se asume ingenuamente que el hecho de que la mayoría de la gente comparta ciertas ideas o sentimientos prueba la validez de esas ideas y sentimientos. Nada más lejos de la realidad... De la misma forma que existe la "folie à deux" existe la "folie à millions". El hecho de que millones de personas compartan los mismos vicios no hace de esos vicios virtudes, el hecho de que compartan tantas equivocaciones no convierte esas equivocaciones en certezas, y el hecho de que millones de personas compartan la misma forma de patología mental no los convierte en cuerdos". (Fromm, "The Sane Society", Routledge, 1955, págs. 14-15).
No es la sociedad con la que yo soñaba cuando era joven. Quería una sociedad más justa, solidaria y comprometida.  Lamento profundamente la sociedad que les dejo a mis hijo y nieto.
Héctor Daniel Fernández

Diciembre 2017 

viernes, 1 de diciembre de 2017

EL IMPERIO DEL CINISMO: REFORMA PREVISIONAL

El tema central para el gobierno hoy en materia previsional es cómo usar el fondo de garantía de sustentabilidad que tiene 55 mil millones de dólares más 10 mil millones del blanqueo, como un modo para financiar al Tesoro y por el otro lado, cómo disminuir en términos reales la jubilación. Este proceso ya comenzó en 2016 cuando los jubilados perdieron el 15,2% de su capacidad de compra con su jubilación.

Mauricio Macri: candidato presidencial por Cambiemos, afirmó que "el 82% móvil" para los jubilados y pensionados "es un compromiso asumido" por su frente, en coincidencia con Sergio Massa.
Gabriela Michetti: Mientras en la pseudo movilidad jubilatoria propuesta por el Gobierno solo se actualizarán montos mínimos, la vice presidenta justificó el recorte porque "es obvio que la Argentina ha desarrollado en los últimos gobiernos demasiadas medidas de demagogia y de populismo". Y además, sostuvo que los jubilados cobran "los montos más grandes de todos". Pero lo que no menciona es que también sufren la inflación de forma mayor que todo el resto de la sociedad.
Nuestra sociedad está atravesada por el egoísmo, envidia, el individualismo y la falta de solidaridad. El mundo de cada individuo pasa solo por lo que le ocurre a él, no se detiene a ver que le sucede al otro. Su mundo es tan solo su núcleo y lo demás no existe. Así sucede con el tema de los jubilados, como algunos han tenido la fortuna, mientras estuvieron en actividad, de hacerse de algunos recursos que hoy les permite no vivir exclusivamente de su jubilación, no se preocupan por los miles que están padeciendo de este despojo. De otra forma no se podría comprender el comportamiento indolente de un importante sector social. No existe empatía con el despojado, no registran la angustia y la desesperación que padece aquel que solo vive de su jubilación y que no le alcanza para satisfacer sus necesidades básicas, que son la mayoría.
La reforma provisional es una muestra del desprecio oficial, de esa voluntad de dar siempre otra vuelta de turca, de ajustar cada vez más la soga que ciñe el cuello de los jubilados y trabajadores. Si siguen con estas medidas, el problema de los jubilados desaparecerá totalmente, desaparecerían los jubilados, para ser más explícitos.
El Poder Ejecutivo envía al congreso una reforma previsonal, laboral y fiscal, donde la reforma previsonal es el corazón de todas estas reformas, en la cual los más perjudicados son los jubilados, porque les sacaran más de 110.000 millones anuales. Desfinancian el Anses para cubrir algo el déficit fiscal que hicieron crecer con la deuda, además para otorgarles algo de dinero a las provincia y substancialmente financiar el futuro político de la Gobernadora de la provincia de Buenos Aires María Eugenia Vidal, con el fondo del conurbano a quien le transferirán 100.000 millones. Este acuerdo firmado con los Gobernadores de las provincias, muchos de ellos que se dicen Justicialistas, y no les digo “Peronistas” porque deshonran el nombre, traicionan la esencia de la doctrina Justicialista.  Nobleza Obliga debemos apartar de este infame grupo al Gobernador de San Luis, quien se negó a firmar. "Espero que esta elocuente evidencia convenza a los demás compañeros y a la masa popular sobre los verdaderos valores de algunos dirigentes, como así mismo puedan discernir con claridad entre los que sirven y los que son sólo simuladores que no persiguen otro fin que sus intereses personales, en procura de una riqueza tan infamante como sus procedimientos." Juan Domingo Perón.
Que apoyaran y votaran las huestes del gobierno no asombra, dado que son los mismos que en la otra Alianza (de la Rua), les descontaron el 13% a los Jubilados. Pero que los gobernadores y senadores “Justicialistas” apoyaran y votaran estas reformas que saquea a los jubilados para repartirse unos pesos que no solucionara nada, es una canallada. Porque no se lo sacaron a las sojeras, mineras, exportadoras, financieras, bienes personales, empresas de energía, entre otros que vienen ganado fortunas, pero lógico los jubilados no representan el poder, lo que demuestran que son tan solo una “banda de cobardes”. Estos que se dicen representantes” del pueblo, solo velan por sus intereses y no les importa que sucede con el pueblo. Es hora de plantearnos de cambiar esta democracia representativa por una participativa y revocatoria. Seguramente que ellos tienen su futuro resuelto, incluso el de sus hijos y nietos, viven en una burbuja, que les puede importar un jubilado que ha trabajado toda su vida y ahora debe vivir en la pobreza. Se los castiga y se los ofende, con sus actos y los dichos.
Cuando uno se jubila, luego de muchos años de trabajo y aportes, sus últimos años debería poder vivirlo de la misma forma que lo hizo en actividad y no ver como se derrumba su calidad de vida, como ocurre ahora.
Está visto que gobierno les saca a los más pobres para darle a los que más tienen, o sea, beneficia a su clase social (ricos), quienes pueden hacer un mayor sacrificio, a esos beneficia. Les saco retenciones a los señores del campo, a las minera, condonó deuda a empresas, y ahora les bajara los aportes patronales y pretenden un blanqueo de trabajadores para los empresarios que perjudicaron a los trabajadores con los aportes. Aprobaron una ley de blanqueo a la medida de familiares y amigos del gobierno, pero sus fortunas no la trajeron al País. Los capitales que ingresan son especulativos, para la bicicleta financiera y no quedan en el País. Nos endeudaron excesivamente y el sólo pago de intereses será la pesada carga de aquí al futuro.  
Aclaremos que todas estas medidas que perjudican a trabajadores y jubilados son por las políticas aplicadas por el gobierno y nada tienen que ver con la pesada herencia, incluso por los dichos del propio Macri, cuando eran oposición y votaron  en diputados el 82% móvil, había dicho, “el dinero para pagarlo esta".
Veamos que  propone esta reforma previsonal, que es lo que más le importa al gobierno, porque se va a quedar con el dinero de los jubilados.    
Antes de empezar a negociar las reformas con los gobernadores y la oposición, el Gobierno logró un primer acuerdo. Pero no fue con ninguno de los actores ya mencionados, sino con Roberto Cardarelli, el jefe de la misión del FMI que estuvo en Buenos Aires poco después de los anuncios de Mauricio Macri en el CCK. El pacto se selló muy discretamente. La exigencia fue sobre el cambio de fórmula para calcular la actualización de los haberes jubilatorios.
Con la modificación acordada entre el Gobierno y un sector del bloque PJ que lidera el “mercenario” Miguel Ángel Pichetto, la nueva fórmula para calcular la movilidad jubilatoria establecía tomar en un 70% la inflación y en un 30% el incremento de salarios. El equivalente: una nueva burla a los millones de jubilados que perciben la mínima, que verían una “mejora” de apenas $60 con respecto a la propuesta del oficialismo.
Más allá de cualquier oportunismo de la política hay un dato objetivo: el cambio de fórmula le permitirá al Gobierno moderar los índices de actualización de haberes y así ahorrar unos miles de millones de pesos al año. Ya está instalado por los expertos que el cambio de fórmula de movilidad es más baja que la actual. Pagaría, en 2018, entre $120.000 millones y $140.000 millones menos en jubilaciones, pensiones, asignaciones familiares y AUH, entre otras prestaciones y abarca a un total de 17 millones de personas. El cambio más inmediato es la modificación de la ley de movilidad que ya para el año próximo implicaría una pérdida de unos 10 puntos que resultaría de mantenerse la actual fórmula. La pérdida anual alcanzaría por lo menos a casi 11 mil pesos para quienes cobran la mínima, incluyendo el aguinaldo, cuanto más cobran, mayor es la pérdida. Actualmente la jubilación mínima esta en $ 7.660, en marzo con la formula Pichetto se irá a $7.660, ahora si se calculara con la formula que anterior cobrarían $ 8.226.
Expertos señalaron que en lugar del 24% que correspondería para el año próximo, los aumentos bajarían al 14 o 16%, y en consecuencia los beneficiarios de esas prestaciones tampoco recuperarían la pérdida de 2016.
En esta línea, si se tiene en cuenta que el primer aumento se aplicó en marzo de 2009 y luego semestralmente, el haber llegó a $7246, un incremento del 950 por ciento entre marzo de 2009 y septiembre de 2017, cuando la inflación fue del 692 por ciento. Si se hubiera aplicado la propuesta del Gobierno, la jubilación hoy sería de $5470, un 25 por ciento menos, lo que equivale a $1800 menos por mes.
La canasta de los jubilados nada tiene que ver con la canasta común y, por ende, la inflación no es la misma, solo los medicamentos aumentaron un 170% entre 2015 y 2016, el IPC mostró una variación del 73%. El perjuicio será entonces por partida doble: el aumento de las jubilaciones será más bajo y por un coeficiente de ajuste que les hará retroceder aún más en poder adquisitivo. No sólo afecta por la canasta, sino que la quita de subsidios en los servicios (salario indirecto) los perjudica e incide en forma muy importante, porque ahora deben destinar una suma elevada para su pago (que nada tiene que ver con la incidencia que calcula el INDEC) o bajar su calidad de vida, comprando productos de menor calidad, no pudiendo alimentarse adecuadamente, no poder caleaccionarse debidamente en invierno, tener que hacer ahorro desmedido de energía eléctrica, o sea una vida de prohibiciones. Es injusto llegar a fin de sus años y tener que pasar estas privaciones esenciales para una vida digna. La calidad de la salud se ha resentido, porque el PAMI ha quitado medicamentos gratuitos, la calidad de las prestaciones cada vez son peores y los turnos se pierden en el tiempo. En PAMI se mendiga salud. Incluso le sacaron uno de los pocos entretenimientos gratuitos que tenían como era fútbol para todos, que también prometieron mantener.
Los hechos objetivos son que tenemos 3 millones de jubilados (70% de ellos) con un haber paupérrimo de $7.600 cuando su canasta supera los $15 mil. Cuando no hay un salario que se corresponda, cómo optar por jubilarme si el haber no me garantiza el actual estandar de vida. Quienes trabajaron toda su vida deberán “optar” por retirarse con jubilaciones miserables o seguir trabajando hasta los 70.
DESFINANCIAR EL ANSES
Menores ingresos para ANSES por cambios impositivos: Es porque ANSES, podría perder alrededor de $67.800 millones en 2018. “Esto se produce debido a que el organismo dejaría de percibir el 20% de lo recaudado por Ganancias ($128.300 millones), pero recibiría el 30% restante del impuesto al cheque ($60.500 millones), según el Instituto de Trabajo y Economía.
Pero como el impuesto al cheque podría ser tomado a cuenta de Ganancias y en consecuencia podría ir menos dinero a la ANSES “el desfinanciamiento a la ANSES podría llegar a los $219.000 millones en 2018”.
Reducción de contribuciones patronales: La propuesta oficial es pasar del 17% y 21% ( según sectores) de contribución sobre el salario bruto a cargo del empleador a una alícuota única del 19,5% eliminando las diferenciaciones geográficas y distintos programas de exenciones existentes hasta el momento. Y se aplicaría no sobre el salario bruto total sino descontando un mínimo no imponible (MNI) creciente que arranca de $2.400 hasta ubicarse paulatinamente en 2022 en un valor equivalente al poder adquisitivo actual de $12.000.
Blanqueo laboral: la regularización de trabajadores no registrados podría mejorar la recaudación de la Seguridad Social por los nuevos aportes y contribuciones de los trabajadores blanqueados. Pero como contra partida se propone que los salarios hasta $ 12.000 no tengan aportes previsonales, perjudicando las arcas del ANSES.
Si se aprueban todos esos cambios, el menor financiamiento de la Seguridad Social obligaría a mayores cambios, entre los que se mencionan un eventual aumento gradual de la edad jubilatoria y modificar hacia abajo el cálculo de las futuras nuevas jubilaciones. EL FMI y otros organismos financieros vienen planteando esa alternativa y que las futuras jubilaciones bajen del 65% del sueldo al 45% a complementar con aportes adicionales voluntarios.
Estas políticas del gobierno y su permanente intento de precarizar y pauperizar el sistema previsional mediante conocidas y padecidas medidas neoliberales de los 90, hipotecan el futuro de las generaciones a jubilarse en la próxima década y las condenan lisa y llanamente a la pobreza.
También digamos que la ley de reparación histórica es el máximo exponente de las intenciones de la gestión macrista de vaciar el fondo de garantía de sustentabilidad.  La ley de reparación histórica, donde figura la creación de una comisión que se va a dedicar a reformar el sistema previsional y tiene como nombre 'comisión de sustentabilidad previsional'. Qué significa esa palabrita 'sustentabilidad' de la que no sólo la ley de reparación histórica habla sino también el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial y los organismos internacionales hablan.
En el país el sistema previsional se financia en un 50% con aportes y contribuciones y un 50% con impuestos. La “sustentabilidad” sería que el sistema se financie solamente con aportes y contribuciones, por lo que si saco el 50 % de los impuestos, a las jubilaciones hay que llevarlas a un 50% de lo que cobra hoy un jubilado.
Todo el resto de medidas que se están tomando además de la reparación histórica "como la disminución de pensiones a personas con discapacidad, a las personas más pobres, todo esto diría que son los daños colaterales del sistema que se llevan puesto al resto de los programas. El tema central para el gobierno hoy en materia previsional es cómo usar el fondo de garantía de sustentabilidad que tiene 55 mil millones de dólares más 10 mil millones del blanqueo, como un modo para financiar al Tesoro y por el otro lado, cómo disminuir en términos reales la jubilación. Este proceso ya comenzó en 2016 cuando los jubilados perdieron el 15,2% de su capacidad de compra con su jubilación, así que llegar al 50% no es muy difícil ni imposible.
El tema de la sustentabilidad que es la madre de las batallas para el FMI, el Banco Mundial"  y para el Gobierno. En la Argentina, hasta el 2015, se invertía en seguridad social 9,2% del PBI, mientras que esos organismos internacionales hablan que el gasto en ese concepto para los países subdesarrollados no debe superar el 4,5 % o el 5% del PBI. Todo tiende al mismo rumbo: hay que ganar la mitad o reducir la cantidad de jubilados a la mitad.
Otra recomendación del FMI es el aumento de la edad jubilatoria. Además de la modificación de la llamada tasa de sustitución, que es la relación entre lo que gana una persona cuando se jubila y lo que ganaba cuando era un trabajador activo. Ese cálculo hoy está en el orden del 60% y la quieren disminuir al 30-35% porque haría sustentable un régimen de capitalización, que ha demostrado una incapacidad absoluta para poder pagar una buena jubilación, aunque una buena capacidad para pagar una jubilación del 35-36% como ocurre en Chile, después de haber vivido un proceso de largo plazo. Es probable que este camino también se recorra.
A lo que vamos es a una jubilación limitada, acotada, que sería para los trabajadores comunes y corrientes y finalmente un régimen de capitalización para los de mayor capacidad económica. Basavilbaso meses atrás, mientras brindaba su informe ante la Comisión Bicameral de Seguimiento de los Fondos de Garantía de Sustentabilidad (FGS) en el Congreso Nacional, se refirió a que nuestro país debiera pensar en un sistema de “ahorro voluntario”. Con el disfraz de lo “voluntario”, quiso tapar la palabra clave: Ahorro. Este término comenzó a emplearse en la reforma de 1994 donde se incorporó el sistema privado de jubilaciones gestionado por las Administradoras de Fondos de Jubilaciones y Pensiones (AFJP) que tiró por la borda y aniquiló el régimen solidario propiciado por la seguridad social desde antaño
El plan no es ni más ni menos que la vuelta de las políticas neoliberales impuestas por los organismos financieros de créditos, como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el nuevo Fondo agiornado llamado OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos), que no se resignan en absoluto e impostan a los países de la región viejas recetas con nuevas palabras.
Estos organismos no sólo recomiendan la suba de la edad jubilatoria y el sistema de ahorro, sino también el congelamiento de las prestaciones y la reducción de los aportes personales como herramientas de la reforma previsional.

Héctor Daniel Fernández
Diciembre 2017 

viernes, 24 de noviembre de 2017

REFORMA LABORAL Y PREVISONAL:

DIRIGENTES QUE HAN EXTRAVIADO EN EL CAMINO LAS BANDERAS CUYA CUSTODIA LES FUE CONFIADA.
Ante la inminente aprobación en el Congreso Nacional de la Reforma Previsional y Laboral, y el consentimiento del Triunviro de la CGT, me sentí profundamente traicionado y vendido por estos dirigentes gremiales. Seguramente estos señores que acordaron con el Gobierno empresarial – neo liberal la pérdida de derechos, saben que nunca más volverán a una fábrica, que jamás volverán a ser obreros, porque han resuelto económicamente su futuro, el de sus hijos y nietos, por lo tanto han olvidado la condición de trabajadores y se han puesto el traje de empresarios y por eso traicionan por igual a trabajadores y jubilados.
Quería escribir sobre la condición de estos pseudos “dirigentes obreros”, y buscando en mi biblioteca, encontré un texto que cabe muy bien en este momento y expresa mucho mejor lo que siento y quiero de los dirigentes gremiales. Los invito a leerlo con detenimiento y reflexionar. El tiempo pasa pero hay ciertas cosas que tienen vigencia a pesar de los años, esto es una de ellas: Parte del texto: La hora de la Verdad – Congreso Normailzador de la CGT Amado Olmos 1968:
"Empezaron sintiendo vergüenza por sus ropas de obreros, trataron de ponerse a tono con los despachos y antesalas ministeriales y poco a poco de representantes obreros frente al poder se convirtieron en representantes del poder frente a los obreros."
"Se enriquecieron, adquirieron hábitos y vicios incompatibles con sus cargos de dirigentes sindicales, burocratizaron sus sindicatos, los transformaron en maquinarias sin contenido, se limitaron —en el mejor de los casos— a la acción social, el tanto por ciento de aumento en cada nuevo convenio, los hoteles de turismo, las colonias de vacaciones."
"Olvidaron que los trabajadores no pueden ni deben mantenerse al margen de los problemas fundamentales de la vida nacional."
"Olvidaron que la política del gobierno contraría los intereses de la clase trabajadora."
"Toleraron los avances incesantes de los monopolios que rigen la economía del país, arruinando a las empresas nacionales, especulando con la desocupación que abarata la mano de obra, envileciendo los salarios."
El texto que transcribo parcialmente más abajo es nada menos que de Ricardo Carpani,  quien puede ignorar, su compromiso, sus dibujos y sus obras de arte. Pero también escribiendo era un inmenso artista. Espero que sirva de inspiración y reflexión a dirigentes y trabajadores.
Para no quitarle peso a su escrito, paso a trascribir parte del texto para la CGT de los Argentinos; Abril de 1973. Lo subrayado y en negrita me pertenece.
“A partir del golpe contrarrevolucionario de setiembre de 1955, la lucha de la clase obrera argentina ha estado jalonada por una serie de momentos culminantes, que determinaron cambios sustanciales en la continuidad de su accionar político.
Inmediatamente después de la restauración oligárquica del 55, la militancia obrera peronista, lejos de resignarse ante la derrota momentánea, inicia una larga lucha por la recuperación popular del poder. Masacres y fusilamientos, tortura y prisiones, serán las respuestas sistemáticas del régimen vende-patria.  Cambiarán los hombres y los ropajes —"constitucionales" o "de facto"—, pero no cambiarán sus métodos represivos ni la esencia reaccionaria, burguesa, dependiente y pro-imperialista que lo caracterizan.
Sin embargo, la represión no será su única respuesta. Habrá también otra más sutil y efectiva: la corrupción y el soborno, directos o indirectos, de las direcciones sindicales. Muchos dirigentes entrarán en el juego, transformándose en burócratas y traicionando a su clase. Para quienes permanezcan fieles a ella y para el resto de la militancia revolucionaria peronista la lucha se planteará en el futuro en un doble frente: contra el régimen y contra la burocracia sindical y política del Movimiento, objetivamente aliados en la defensa de sus bastardos intereses coincidentes.
Sobre la base de esa lucha y respondiendo a la voluntad crecientemente combativa de los trabajadores, la tendencia revolucionaria del peronismo obrero consigue desplazar a los burócratas traidores en el mencionado Congreso Normalizador. Estos, con el apoyo gubernamental, desconocen el Congreso y dividen al movimiento obrero. Nace así la CGT de los Argentinos y con ella comienzan a escribirse a través de su periódico las páginas de esta recopilación.
Destaco en primer término el lúcido reconocimiento de que nuestra lucha de liberación nacional contra el imperialismo es inseparable de la lucha de clases, ya que éste ejerce su dominio expoliador a través de sus socios subordinados: la gran burguesía nativa y un ejército supuestamente nacional, pero, en los hechos, mero brazo armado de esa burguesía y los monopolios internacionales.
Siendo la lucha de liberación nacional una lucha de clases, sólo a los trabajadores unidos y organizados corresponde la dirección hegemónica del proceso, que no podrá por lo tanto detenerse en la simple expulsión de los monopolios imperialistas, sino que implica también el desplazar simultáneamente del poder a todos los sectores de la burguesía nativa —esencialmente dependiente— destruyendo el sistema capitalista e iniciando la construcción del socialismo en nuestra Patria.
Cabe señalar, además, el carácter eminentemente político revolucionario y, por lo tanto, antiburocrático, que imprimió a su accionar la CGT de los Argentinos desde sus orígenes: "El movimiento obrero no es un edificio ni cien edificios; no es una personería ni cien personerías; no es un sello de goma ni es un comité; no es una comisión delegada ni es un secretariado. El movimiento obrero es la voluntad organizada del pueblo y como tal no se puede clausurar ni intervenir".
Concretamente, la lucha sindical adquiere real sentido revolucionario tan sólo si se la considera como un aspecto de la lucha política contra el imperialismo y el sistema capitalista. De ese modo, toda argumentación tendiente a justificar la inactividad política o la conciliación con el sistema en aras de preservar una supuesta defensa sindical de los trabajadores, demuestra su verdadero carácter reformista; mera argucia de burócratas amarillos cómodamente instalados en dicho sistema. Frente a ella la CGT de los Argentinos afirma: "Preferimos honra sin sindicatos que sindicatos sin honra". Así: "La lucha por mejores condiciones de vida es inseparable de la lucha por el poder". Y esa lucha por el poder es para el movimiento obrero el factor fundamental al cual todos los otros deben estar subordinados.
En el segundo caso afirmando que no puede haber unidad con los enemigos del pueblo ni con los traidores a la clase obrera; que la única unidad posible y deseable sólo puede darse en la lucha constante y efectiva contra el sistema; que sólo de esa lucha puede surgir una auténtica organización revolucionaria de la clase obrera peronista; y que esa organización no habrá de resultar de la aplicación mecánica, hecha desde arriba, de modelos abstractos, sino de la experiencia concreta y viva de las bases, templadas en la diaria pelea.
Está claro que ya no podrá reeditarse la misma experiencia que llevó a la derrota del 55. Está claro que no bastará con el control del aparato gubernamental burgués, pues ese control será siempre necesariamente condicionado y neutralizado por todos los reaseguros para el sistema, derivados del propio carácter burgués del aparato estatal. Está claro, entonces, que lo único que puede garantizar el desarrollo y cumplimiento de nuestra lucha de liberación no es ya el control —obligadamente relativizado— del gobierno, sino el poder real y efectivo de los trabajadores organizados, como punto de arranque hacia la construcción de un socialismo nacional de proyección latinoamericana.
Ello implica necesariamente el desmantelamiento de la vieja maquinaria gubernamental burguesa y su reemplazo por otra, en la cual ese poder de los trabajadores y el pueblo pueda realizarse en forma directa, pasando éstos a ser los verdaderos constructores de su propio destino. Tal es la perspectiva de lucha que se abre en esta nueva etapa al peronismo revolucionario y a la que podemos caracterizar como de lucha abierta y definitiva contra todo tipo de reformismo. Revolución o reformismo, constituye el dilema fundamental que deberán resolver los trabajadores argentinos, y de que se imponga uno u otro depende la realización o frustración de nuestra liberación nacional y social en el corto o mediano plazo.
Se abren así nuevas perspectivas de lucha que pueden permitir el paso de la etapa de resistencia al régimen militar vende-patria a una ofensiva creciente y definitiva contra el sistema burgués-imperialista. Pero el acceso del peronismo al gobierno no significa todavía la derrota del sistema, ya que éste tiene sus representantes en las propias filas y puestos directivos del Movimiento; simplemente polariza las opciones fundamentales y clarifica la lucha. Las clases dominantes no abandonan pacíficamente la escena política; mucho menos si detrás de ellas se encuentran intereses de tal magnitud como son los del capital financiero internacional capitaneado por el imperialismo yanqui.
La derrota definitiva del sistema implica, pues, la construcción de un ejército del pueblo, el ejército peronista, capaz de oponerse y derrotar al ejército del sistema. Implica también la organización revolucionaria de la clase obrera peronista, como dirección natural de ese ejército y de todo el proceso. Y ello es inalcanzable sin el desplazamiento simultáneo de los burócratas conciliadores, sindicales y políticos, que pululan en puestos directivos del Movimiento. La lucha por concretar este proceso se inserta en lo que el Gral. Perón definió como "etapa de derrota y persecución del enemigo".
Los postulados y las acciones de la CGT de los Argentinos en su breve y fecunda historia prefiguraron cualitativamente las características de la lucha futura. La nueva etapa implicará un aumento cuantitativo y una profundización y enriquecimiento de esos postulados y acciones. Se cumplirá así con la mayor aspiración de los trabajadores argentinos: "CON PERÓN Y ELPUEBLO AL PODER -POR LA CONSTRUCCIÓN DE UNA PATRIA JUSTA, LIBRE Y SOBERANA -LA PATRIA SOCIALISTA". La ruta que conduce a ella se encuentra en la verdad fundamental de aquella consigna que dice: "SOLO EL PUEBLO SALVARÁ AL PUEBLO".
Héctor Daniel Fernández
Noviembre 2017


miércoles, 8 de noviembre de 2017

CUARTO CICLO - NO SUBESTIMAR AL GOBIERNO

Desde el regreso de la democracia, hoy podríamos decir que estamos atravesando el cuarto ciclo, comenzó con el alfonsinismo, luego vino el menemismo y el kichnerismo, y ahora se afianza el macrismo. El macrismo forma parte de esos ciclos por errores, fragmentación, vanidad y mezquindad de la oposición. Algunos se han presentado como oposición, pero son parte del mismo proceso y su fin es dividir y así favorecer al macrismo - radicalismo. Ese sector de la oposición es "colaboracionista" y cómplice del oficialismo.
La oposición real, no supo o no quiso aglutinar, sintetizar y representar, bajo propuestas programáticas, todas las demandas y protestas sociales y laborales existentes.
Después de dos años en los que el gobierno aplicó políticas muy distintas de las que había prometido en la campaña de 2015, Cambiemos ha recibido un respaldo electoral cuya relevancia política no puede menospreciarse.
Su capacidad de comunicación y la concentración mediática han sido apoyos cruciales. Sin embargo, de ninguna manera han sido el único factor.
Uno de los logros del gobierno es su éxito del relato macrista, identificando el período de gobierno anterior con un plan de corrupción y desmanejo económico.
Pero no se debe subestimar o quedarse con el solo reproche de que la gente que lo voto está siendo manejada por los medios y la efectiva comunicación.  Las ideas habituales en 2016, de que “este gobierno choca en seis meses” o que “terminan como el 2001” minimizaban la capacidad política de  Cambiemos. La idea de una debacle, que incluso sostuve en anteriores escrito, es parte de la experiencia en nuestro país y la suposición de que el neoliberalismo no es económica y políticamente sustentable. Pero también esta tesis puede tener sus errores, dado que en muchos de los países del mundo, donde esas políticas se aplican llevan décadas sin estallidos. Las situaciones económicas y políticas dependen de una multiplicidad de factores. Nada es automático. Macri y Cambiemos tienen el plan de aplicar su proyecto y darle sustentabilidad económica y política. Eso es lo nuevo.
Este gobierno logro ganar las elecciones de medio término, como lo han hecho los gobiernos que lo precedieron desde el regreso de la democracia, excepto De La Rua, anunciando ajustes, aumentos, seguir con el acelerado endeudamiento externo y modificaciones en lo laboral, provisional y fiscal. Han logrado convencer a sus votantes que todo ello es por culpa del anterior gobierno y la necesidad de ordenar las cuentas. Cosa que no es así, dado que ellos aplicaron políticas económicas que claramente beneficia a su sector social: poderoso y que todos los demás debemos pagar los beneficios que ellos se están adjudicando. Una vez más los jubilados y los trabajadores cubrirán con la disminución de sus haberes, el abultado déficit fiscal y no los que más tienen. El problema es que las consecuencias de las políticas regresivas pueden derrotar a las resistencias que se le oponen y también pueden generar expectativas e ilusiones. Podemos estar en presencia del Síndrome de Estocolmo en masa.
Pero lo otro novedoso de esta nueva etapa neoliberal que estamos viviendo, en comparación con las anteriores, Martínez de Hoz, Dagnino Pastores, Alemán, Caballo, López Murphy entre otros, es que la política está manejando lo económico. Entonces este gobierno tiene bien evaluado a quienes beneficia, y a quienes les puede hacer creer que se están beneficiando, logrando un piso de apoyo como para ser la primera minoría. Mientras usa, mas desenfadadamente la chequera y el látigo con gobernadores e intendentes de la "oposición", además de aprietes o hostigamientos judiciales o "carpetazos" sobre dirigentes opositores devenidos a colaboracionistas (Bossio, Pichetto, Massa), para aprobar sus políticas.
También, como muestra del manejo político, siguen manteniendo fuertemente el asistencialismo, con los planes sociales a pesar del elevado déficit fiscal. Compran la paz social y cuidan su caudal de votos.
El triunfo de las elecciones legislativas le ha dado al Gobierno y a Macri, un impulso fenomenal, envalentonados han ido por todo. Exultante y contundente, el presidente Mauricio Macri dijo que podemos “cambiar para siempre”. En la cresta de la ola amarilla, en su mejor momento, puede olvidar que las olas suben y bajan, que nada es “para siempre” y que los momentos pasan. Además cuentan con una "justicia" que se ha transformado en el brazo ejecutor de las decisiones del poder real, representado por este gobierno. Hoy tenemos jueces parciales, con un estado de derecho suspendido y una democracia de baja intensidad. Se ponen presos a ex funcionarios y opositores sin respetar el derecho de inocencia, sin indagatoria ni juicio ni sentencia. Se los condena y escracha públicamente y en general los jueces actúan “presionados” por los grandes medios y funcionarios. Ni los genocidas de la dictadura fueron tratados de igual forma. Mientras que los funcionarios actuales, familiares y amigos denunciados, tampoco se los trata de igual forma, con mayor posibilidad de entorpecer la investigación, según la doctrina Irurzum. Hay más de 50 funcionarios imputados: Panama Papers, Blanqueo de Familiares, Memorándum de Qatar, Correo Gate, Dólar Futuro, Compra de gas a Chile sin Licitación a Shell, Etc. Cada día aparecen más cuentas offshore de funcionarios evasores, pero eso está bien visto en la City, no son acusados como estafadores sino como inteligentes financistas, la ética pública queda por el suelo. La doble vara con que todo se mide según el poder que se tenga. Esto me hace recordar a la dictadura militar, donde había una mayoría silenciosa que callaba por miedo o justificaba todas las aberraciones y una minoría activa que lo denunciaba con los riegos que ello tenía. Ahora también usan el miedo para las políticas que vienen.
Es bueno tener en cuenta todo este proceso y el uso que están haciendo de los distintos poderes e instituciones de la republica, para actuar de la misma forma con ellos cuando abandonen el poder.
Una reflexión: El Pro llegó al gobierno gracias a la estructura del Radicalismo, ahora recuerdo cuando El Dr. Raúl Alfonsin dijo que su límite era Macri. Me parece increíble que los radicales de Alem, Yrigoyen, Illia y Alfonsín no hayan creado una alternativa progresista y se hayan quedado pegados al conservadurismo del ala de Alvear, de la Rúa, Saens y de los neo liberales del Pro, por algunos cargos.
La oposición no puede pensar en hacer política creyendo que es inevitable una crisis como la de 2001. Es subestimar la capacidad del poder, que ha demostrado que ha aprendido de errores anteriores. No se puede depender solo de las propias convicciones y abandonar la vocación política por convencer a otros. No se saldrá del encierro si creemos que uno tiene razón y quitarle importancia a una parte de la sociedad cree que estás equivocado. No se puede quedar en el mero reproche, en la revancha y ofuscados, hay que alejarse de la derrota y la frustración. Debemos dedicar más tiempo a la creación, pensar y hacer cosas nuevas en política. Crear nuevas esperanzas fundadas en la solidaridad, en un país más justo y equitativo, de respeto a las instituciones, conectarnos con lo mejor que tenemos individual y colectivamente. Saber que solo no se puede, hay que sumar otros actores sociales y políticos, fundamentalmente bajo la premisa de Justicia Social, Independencia Económica y Soberanía Política. Pensar por todos. Un cambio cultural profundo es necesario para derrotar esta cultura del individualismo. Necesitamos más política. Las calles y las paredes deben reflejar la realidad que el poder y sus medios nos quieren esconder. Ganar la calle.
La oposición tiene el desafío de comprender este proceso que llevan varios años y generar nuevas alternativas positivas y creativas, si quiere derrotarlo. O quedarán condenados a repetir sus actuales estrategias con iguales resultados, o sea ocho años de Macrismo. De ser así, costara mucho cambiar el rumbo que le están imprimiendo y nos dejaran un país desquiciado del cual será difícil volver.
Héctor Daniel Fernández
Noviembre 2017


lunes, 23 de octubre de 2017

LAS ELECCIONES Y EL CANTO DE SIRENA

Cantos de sirena: frase utilizada para todas las situaciones que embelesan, seducen o arrastran a una persona por su magnificencia, grandiosidad o por sus perspectivas de futuro, cuando en realidad son falsas, simples rumores.
Duran Barba (Asesor de Macri y del Pro) de su libro el “arte de ganar”: “El electorado está compuesto por simios con sueños racionales que se movilizan emocionalmente. Las elecciones se ganan polarizando al electorado, sembrando el odio hacia el candidato ajeno… Es clave estudiar al votante común, poco informado, ese que dice “no me interesa la política”… El papel de los medios es fundamental, no hay que educar a la gente. El reality show venció a la realidad…”

Los resultados de las elecciones de Octubre de 2017, han confirmado y afianzado el comportamiento de un sector importante de la sociedad, es el triunfo de un proyecto cultural, social y económico donde se privilegia lo individual sobre el conjunto. Una política donde unos pocos ganan y la mayoría es la perjudicada. Se impone una realidad como en la mayoría de los pueblos de Latinoamérica, África y Asia, donde sus habitantes empobrecidos votan y apoyan a quienes son sus explotadores, torturadores y verdugos, quienes se quedan con todos los beneficios de su sacrificio y viven con resignación su pobreza y miseria, como si fuera un designio divino. Son como los esclavos que prefieren vivir en la mansedumbre y seguridad de su esclavitud, que luchar por vivir en la inquietante incertidumbre de la libertad.   
Una parte importante de la sociedad se siente identificada con este gobierno neo liberal de Ceos y empresarios de la patria contratista. Esa parte de la sociedad siente empatía, se cree que son como ellos, aunque no lo son obviamente, sólo van tras ellos como quien va detrás de los cantos de sirena. Es una sociedad que se siente identificada con Macri, Vidal, Carrio, Peña, Bermang o Patricia Bulrrich, por nombrar algunos, de frondoso prontuario de contradicciones y miserias. Llegaron mintiendo y no les importo, ahora les dijeron la verdad y tampoco les importo, porque se creen fuera del alcance del ajuste y las reformas laborales, previsonales y fiscales que se vienen, nos les importa el endeudamiento alocado porque creen que ellos no lo van a pagar. Piensan que ellos están al margen de todos los males, que sólo afectara a la “chusma”, a los que no son como ellos. Esa porción de la sociedad que estaba en el closet, resentida y con odio, egoísta e individualista, hipócritas y de baja calidad humana, que se dicen cristianos, que van a la iglesia, creen en Dios, pero desprecian y estigmatizan al pobre, al inmigrante, al desprotegido, reniegan de los curas por la opción por los pobres y hasta del mismo Papa Francisco, cuando defiende  estas cuestiones («Hijos míos, no amemos de palabra y de boca, sino de verdad y con obras»)("¿Qué le pasa al mundo de hoy que, cuando se produce la bancarrota de un banco de inmediato aparecen sumas escandalosas para salvarlo, pero cuando se produce esta bancarrota de la humanidad no hay casi ni una milésima parte para salvar a esos hermanos que sufren tanto?"). Esos que hacen beneficencia con lo que los sobra. Este gobierno le permitió liberarse y pedir represión a los que defienden las fuentes de trabajo, a los que piden pan, trabajo o cualquier otra tipo manifestación social. Para ellos es más importante transitar con su auto que las necesidades angustiantes de los otros. Son los que reclaman mano dura. No se conmueven o justifican la muerte de un joven ante la represión de una fuerza de seguridad del Estado, como lo hicieron durante la dictadura genocida, expresando cuando desaparecían gente, por algo será o en algo andará. Avalan la tortura y los vuelos de la muerte. No reconocen la obligación insoslayable del Estado y defienden la teoría de los dos demonios. Criticaron el juzgamiento de los genocidas o sobre las legalidades que garantizan procesos jurídicos del mismo Estado de Derecho.  Son los que dicen que los derechos humanos son un curro. Son esos que aplauden la libertad domiciliaria de los genocidas de lesa humanidad, pero no aceptan que Milagros Salas este libre o con prisión domiciliaria, que el derecho la asiste. Condenan, sin juicio previo, que el gobierno anterior se robo todo y piden que vayan todos presos, pero votaron a un presidente procesado, no quieren ver los negociados que se están haciendo entre parientes y amigos, los Panamá Papers, Odebrecht, El Correo, blanqueo de capitales, la adjudicación directa de obras públicas, el manejo escandaloso de la justicia, con jueces y fiscales adherentes y militantes, con fallos que van en contra del estado de derecho. Si este sector acepta todo esto, es porque ellos son iguales y de estar en ese lugar harían las mismas cosas, reñidas con la ética, moral, decencia, honestidad, respeto por las instituciones y la justica. Sobre todo no les importa el otro, tan sólo le interesa él y su círculo.  Muchos sufren el síndrome de Estocolmo : Trastorno psicólogico temporal que aparece en la persona que ha sido secuestrada y que consiste en mostrarse comprensivo y benevolente con la conducta de los secuestradores e identificarse progresivamente con sus ideas, ya sea durante el secuestro o tras ser liberada.
Son aquellos que ante la posibilidad de ser libres querían seguir siendo súbditos del Rey y seguir siendo colonia. Son los mismos que viviendo en Buenos Aires negaban los recursos o no querían enviarle dinero a las tropas que luchaban por la independencia. Son los mismos que financiaron la conquista del desierto, avalaron la matanza de indios, se quedaron con sus tierras y repartieron los indios para trabajar como esclavos en las casas y estancias. Al igual que sus antepasados que conquistaron estas tierras, a sangre y fuego, y con la cruz como estandarte y en nombre de Dios.
Son los mismos que comparten los dichos del presidente de Argentina, Domingo Faustino Sarmiento defensor de la pureza racial. Sarmiento veía su país como un gran desierto a poblar por nuevos contingentes blancos que desplazaran la “barbarie de la población nativa. Por ello llegará a alabar el exterminio de los guaraníes en la guerra de Paraguay, o el de los gauchos cuya sangre “únicamente servía para abonar la tierra”.
“Se nos habla de gauchos… la lucha ha dado cuenta de ellos, de toda adistribuían armas y brazaletes, partían en coches manejados por jovencitos oligarcas y, al grito de "¡Viva la Patria!", se dirigían a las barriadas obreras, sindicatos, bibliotecas populares, sedes de periódicos socialistas y anarquistas, todo bajo el ala cómplice de la policía. Produjeron los trágicos sucesos de los talleres Vasena y la Patagonia trágica.
Los que calificaron de aluvión zoológico o cabecitas negras a los trabajadores el 17 de Octubre. Paradójicamente muchos de los descendientes de esos trabajadores, gracias a Perón y el ascenso social, lograron que sus hijos estudiaran y fueran profesionales egresados de escuelas y facultades públicas. Estos profesionales y sus hijos reniegan del pasado y de lo público, se creen con otro nivel al poseer una situación social mejor, sin admitir que lo tienen por las políticas de un gobierno popular. Les hicieron creer que fue por el sacrificio propio, pero sin esas políticas no hubieran llegado a ser lo que son. Los Medio Pelo, que también describe Arturo Jauretche. 
Unión Democrática, Braden o Perón, Patria o Colonia, y los atentados del Comando Civil Antiperonista, en todo estuvieron ellos.
La historia se repite, tomando distintas formas, pero siempre con el mismo resultado.
Lo más grave que los beneficiados son tan solo unos pocos y los demás, que se creen que son como ellos, los siguen como zombis, hipnotizados con el canto de las sirenas
Este Gobierno, en tan sólo dos años hizo lo que gobiernos populares no pudieron o no quisieron hacer, manejan los tres poderes (látigo y chequera), responden al poder económico multinacional  y están amparados por los medios de comunicación. 
Los gobiernos populares fallaron en la concientización de la solidaridad y crear un poder popular para contrarrestar el individualismo mezquino de este sector social. Hubo un desierto cultural donde avanzo y se afianzó el individualismo, el macrismo le dio entidad y lo empoderó. Hoy se apoderan del Estado y están avanzando rápidamente en la conquista cultural para cambiar la concepción de País.
Si hoy nos ocurre esto, es porque los líderes populares no supieron construir una alternativa mejor, pensaron más en sus intereses personales y partidarios que en la gente.  Costara mucho romper con esta avance del individualismo, porque hoy los dirigentes de la oposición están también contaminados de individualismo aunque manifiesten lo contrario.

Octubre 2017.
Héctor Daniel Fernández 

domingo, 15 de octubre de 2017

REFORMA LABORAL: Lo que se viene, lo que se viene

En un contexto internacional desfavorable para la clase trabajadora, donde desde la caída del muro de Berlin y el abandono del Estado de Bienestar se fueron suprimiendo derechos y la derecha neo liberal se apodero de lo económico, aumentando exponencialmente los niveles de concentración de la riqueza, además la derecha racista cada día gana mayor espacio. Europa se encuentra invadida por inmigrantes de países desbastados por guerras generadas por los países occidentales. Muchos de ellos (Grecia, Portugal, Irlanda, España, Italia) endeudados excesivamente que no les permite crecer. Latinoamérica giro a la derecha, producto en algunos casos de los llamados "golpes blandos" o parlamentarios y otros por elecciones, todos motorizados por la acción del poder económico y financiero, apoyados por los medios periodísticos afines, terminando con una nueva etapa de conquistas de derechos. Para tener en consideración y como reafirmación de todos estos cambios, tenemos el triunfo de Trump en EEUU. Además el regreso del FMI y BM a dictaminar las políticas económicas de los Países.
Estamos al borde de una revolución tecnológica que modificará fundamentalmente la forma en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos. En su escala, alcance y complejidad, la transformación será distinta a cualquier cosa que el género humano haya experimentado antes. Lo que defendemos es que ese cambio sea para vivir mejor, repartir las horas de trabajo entre más gente, o sea menos horas de trabajo por salarios dignos y no que la tecnología sirva para expulsar trabajadores y aumentar –aún más – la inequidad  y las ganancias de las empresas.
En nuestro País avanza la Reforma laboral de manera sigilosa. Las modificaciones programadas no irán por un solo lugar, sino que procuraran articularlas por varios lugares, cambiaran los Convenio Colectivos de Trabajo como ya viene ocurriendo, se aprobaran algunas leyes que indirectamente afectaran las condiciones de trabajo. Quizás no vayan a presentar una proyecto de reforma laboral integral por la resistencia de un importante sector del Movimiento Obrero y la posible traba en las Cámaras Legislativas. En definitiva se producirán cambios en forma indirecta. Mientras el Gobierno ultima proyectos con sectores de la CGT, bajo la promesa de evitar una "flexibilización a la brasileña", por lo bajo empresas y sindicatos tomaron nota de las señales enviadas por Mauricio Macri y ya negocian cambios en las condiciones de trabajo en los convenios colectivos.  El ministro de Trabajo, Jorge Triaca, mantuvo conversaciones con el triunvirato y la mesa chica de la CGT. Donde el Gobierno a cambio de la paz social, incorporó al sindicalismo a la discusión del proyecto de blanqueo laboral (un perdón a las empresas en infracción para que registren a su personal) y la reintroducción de las pasantías, iniciativas con las que el oficialismo busca bajarle el tono a la "reforma laboral".
El Gobierno preparo las condiciones para avanzar en esta reforma. Las medidas económicas que viene tomando desde que asumieron provocaron el aumento la pobreza, de la indigencia y la desocupación, hoy el 80 por ciento de los trabajadores son pobres. Con la devaluación, aumento de tarifas en los servicios, paritarias que no pudieron superar la inflación y el aumento desmedido de la canasta básica de alimentos generaron una profunda pérdida del poder adquisitivo de los salarios. Con la apertura indiscriminada de la importaciones no lograron bajar los precios, por el contrario, aumentaron las ganancias de los importadores formadores de precios y destruyeron miles de puestos de trabajos y produjeron la caída en la producción industrial, por el cierre de empresas que no pudieron sostenerse ante la avalancha importadora y el aumento descomunal de los servicios. Rompieron con la estabilidad, tranquilidad laboral y económica, generando incertidumbre y temor entre los trabajadores.
El déficit comercial con nuestro principal socio, Brasil, en lugar de equiparse va en aumento. Para colmo el endeudamiento brutal que están haciendo para cubrir gastos corrientes y la fuga de divisas, no hace presagiar un posible 2001 - 2002 a mediano plazo (default). Hemos vuelto al criterio de un estado ausente y a la espera de que el Mercado lo solucione todo.
Crearon un importante colchón de desocupados, los salarios de los ocupados deprimidos y temor por perder el trabajo. Antes nos anunciaron que el segundo semestre del 2016 llegaban las inversiones, ahora nos dicen que si no hay flexibilización laboral no llegaran las inversiones, cosa que nunca pasará, dado que nadie invierte en un País donde es más beneficioso invertir en la bicicleta financiera que en producir. Esta probado, dado que sale más dinero del País producto de la especulación financiera que el ingreso de capitales. Además que invertiría en un País donde sus gobernantes, familiares y amigos, hacen un blanqueo a su medida y dejan el dinero fuera del País. Es un País poco serio. La Reforma laboral tan solo beneficiará a las empresas monopólicas ya instaladas en el País, como ocurrió en los 90. Ver: http://lzrsocialypopular.blogspot.com.ar/2009/05/flexibilizacion-laboral.html - http://lzrsocialypopular.blogspot.com.ar/2009/05/peronismo-y-la-flexibilizacion-laboral.html
Con el objetivo de alcanzar la reforma laboral ya hemos visto las primeras acciones, el ataques a los abogados y jueces laboralistas, para luego seguir por los sindicatos. El ataque selectivo a dirigentes sindicales, no es casualidad. Sabemos que algunos dirigentes sindicales tienen muertos escondidos en el placard, como lo tienen políticos y empresarios, sólo que en este caso el Gobierno los utiliza selectivamente para alcanzar sus objetivos.  Vemos como fueron por el “Caballo” Suarez y por el “Pata” Medina (impresentables), pero no fueron por el “Momo” Venegas ni por otros aliados de Cambiemos.  Tampoco fueron por los empresarios de la patria contratista, muchos de ellos denunciados e integrantes directa o indirectamente del gobierno. "No hay lugar para comportamientos mafiosos" dijo el presidente Mauricio Macri, en obvia referencia a la detención de Medina. Está claro que la advertencia no involucra a las mafias de cuello blanco que operan desde hace décadas en la más absoluta impunidad, y seguirá siendo así porque forman parte del gobierno. Pongamos como ejemplo el caso de La Anónima, que sirve para detectar el rol que eligió jugar el Gobierno del PRO. Propiedad centenaria de la familia que integran el Jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el Secretario de Comercio, Miguel Braun, la firma controla buena parte del comercio minorista en el sur del país. Se supo que La Anónima se quedó con la mayor parte de la Cuota Hilton, el cupo que habilita la exportación de carne premium a la Unión Europea. Favorecido por el gobierno, La Anónima vienen gozando de un crecimiento progresivo: en los últimos años, pasó de cerca de 1800 toneladas adjudicadas a las actuales 2300 toneladas, lo que le permitió escalar al segundo lugar en el listado de exportadores. Como este caso hay varios que están en los dos lados del mostrador. Queda claro.
Los sindicalistas corruptos son los mejores aliados de la precarización, la demonización de la organización sindical y la destrucción de los derechos laborales. Como así también que los dueños del poder y del dinero prefieren negociar con sindicalistas corruptos, a quienes consideran más permeables y pragmáticos, que con dirigentes honestos que son la mayoría. 
Esas mafias (empresarias) aprietan igual o más que los “Pata” Medina, pero con otros métodos: amenazan con despidos masivos, provocan corridas financieras y cambiarias, compran favores políticos y judiciales, y moldean la opinión pública en beneficio propio a través de los medios de comunicación.
No olvidemos que también fueron – entre otros - contra Omar Plaini (Sindicato de Canillitas) y Víctor Santamaría de Encargados de Edificios SUTERH (para silenciarlo por ser presidente del Grupo Octubre Pag.12 y AM750), como advertencia hacia los demás.
 La idea es debilitar a los sindicatos, con el objetivo de tener un sindicalismo débil como los de Latinoamérica o asiáticos y así poder imponer las condiciones de trabajo que ellos (empresarios y gobierno) pretenden. El sindicalismo argentino aún goza de fortaleza: mientras en Brasil el 58% de los trabajadores en relación de dependencia está bajo convenio, la cifra en Argentina llega al 83%. Por encima también de Colombia (15%) y Chile (10%).
El debilitamiento no sólo se busca con menos afiliados producto de la desocupación, sino por eliminar total o parcial de los aportes, si le quitan poder económico, también lo debilitan.
El Ministerio de Trabajo ha empezado también con el disciplinamiento de los sindicatos, se observa en la demora y obstaculización de trámites regulares (certificación de autoridades, estatutos, personería e inscripciones), la impugnación de elecciones fuera de plazo y la intervención de cinco sindicatos.
En el ámbito de la negociación colectiva, los síntomas del cambio se reflejarían en la dilatación de las homologaciones, la dificultad para la expresión de las posturas sindicales en las actas, el dictado de conciliaciones sucesivas en un mismo conflicto, la no intervención en conflictos en los que las organizaciones son débiles y la represión de las protestas encabezadas por delegados. Otro capítulo aparte es el goteo de fondos a las obras sociales, la ley de ART y los recientes fallos de la Corte Suprema, que empiezan a marcar un rumbo más a tono con las quejas presidenciales contra la "mafia" judicial y sindical.
De qué hablamos cundo decimos flexibilización a la brasileña: Entre los principales puntos de su reforma laboral se destacan que las convenciones y acuerdos colectivos en las empresas prevalecerán por encima de las disposiciones legales, eliminación del salario mínimo, pagar en base a horas o días y ya no de forma mensual, jornadas de trabajo de hasta 12 horas con 36 horas ininterrumpidas de descanso, fraccionamiento de las vacaciones y pausas de descanso, se crea la figura del empleado autónomo sin vínculo permanente con la empresa, y la no obligatoriedad de aporte sindical (será voluntario), entre otras normativas no menos polémicas.
La batalla por los convenios
El objetivo de esta reforma laboral es alcanzar acuerdos por empresas o individuales en lugar de por ramas. Los acuerdos incluirán la polivalencia (multitareas), adicionales por presentismo más estrictos, intercambio de planteles entre empresas, el pago por objetivos y el reemplazo de la mano de obra por máquinas. Las mismas apuntan a disminuir costos y aumentar la productividad, sin pasar por el Congreso.
Reducción de los tiempos muertos, evaluaciones de desempeño que miden el rendimiento en lugar de actualizarlos por inflación. Banco de horas, vacaciones fraccionadas, menor cantidad de delegados por planta y baja en las cargas sociales. Aumentaría la edad jubilatoria, eliminaría los aportes a sindicatos y extendería el régimen de contrataciones temporales. A esto se le suma la sustitución de las indemnizaciones para los trabajadores que son echados de sus empleos por un fondo especial para desempleados, la creación de la figura del monotributista dependiente y exclusivo, que es aquel que prestaría servicios para un solo empleador sin un plazo laboral fijo; así como también la imposibilidad del cobro de horas extras si no se llega a la productividad deseada. Precarización, al extremo
La estrategia "sigilosa" sintoniza con los acuerdos sectoriales promovidos por el Gobierno, como el firmado con los petroleros de Vaca Muerta y el que busca cerrar en la lechería. La productividad alcanza a los peajes, la energía y el sector aeronáutico, sacudido por la llegada de las "low cost". También comprende a la industria del software, junto con el rubro automotor y audiovisual. Además, en actividades más intensivas en mano de obra, como los supermercados y sanidad, cuyo gremio es liderado por Héctor Daer. En otros casos surgen conflictos por el incremento en los ritmos de trabajo, como ocurre en el sector del neumático y la alimentación, o porque las cámaras buscan negociar salario por beneficios.
La industria farmacéutica, en tanto, no firma paritarias con los visitadores médicos desde el año pasado. Una de las condiciones es reducir la cifra de delegados. Armando Cavalieri, líder de los empleados de comercio, aspira a cerrar un acuerdo con Autopistas Urbanas (AUSA) para incorporar el autopase, una tecnología que automatiza el proceso mediante barreras inteligentes y reemplazará del todo a los operarios que todavía predominan en la actividad. El avance será introducido en el convenio colectivo junto con una cláusula de reubicación de los trabajadores desplazados por máquinas. En los supermercados, la "flexibilización" se impuso de hecho, los supermercados redujeron en los últimos años sus plantillas para recortar costos, lo que redundó en la multiplicación de tareas sin importar la categoría del empleado.
La industria automotriz tampoco se queda atrás. El titular del gremio metalmecánico Smata, Ricardo Pignanelli, acaba de cerrar un acuerdo para reubicar 80 trabajadores de Volkswagen en Mercedes Benz.
A pesar de todo ello, los asesores corporativos se muestran optimistas, según ellos dicen que "Hay un doble discurso, públicamente los gremios se muestran duros, pero después se sientan a discutir porque se generan nuevos puestos de trabajo". En muchos casos, los sindicalistas están dispuestos a rediscutir aspectos clave de los convenios. En declaraciones recientes Héctor Daer, uno de los triunviros de la CGT y representante de los "gordos", dijo estar dispuesto a conversar sobre la reforma laboral. Antonio Caló, José Luis Lingieri, Julio Piumato y a Carlos Schmid participaron por primera vez y fueron las estrellas del cóctel con el que se inició el Coloquio de Idea en Mar del Plata. Caló ofició de vocero ante los periodistas y aseguraba que “estamos acompañando al Gobierno, quién lo duda”.  Para pensar lo que se viene.
Convengamos que el gobierno viene anunciando nuevos ajustes y poner en marcha la reforma laboral y previsional después de las elecciones, si fuera algo bueno para los trabajadores lo harían antes de las elecciones. Está claro que este gobierno neoliberal, que en estos 20 meses no impulsó ninguna ley positiva para los trabajadores, va intentar una profunda flexibilización laboral.
Acordemos  que todo esto lo puede hacer  (el Gobierno) porque hay un batalla cultural la cual el individualismo, el salvarse sólo, le viene ganado al bien común y a la solidaridad. Esta es una nueva colonización, donde nos están comprando con espejitos de colores y alcohol, para sacarnos nuestras riquezas y las tierras, además de hacernos esclavos.  Tampoco olvidemos la acción de los medios de comunicación hegemónicos para lograr su cometido, tan incluyentes en la opinión pública, si nos hicieron creer que ganábamos la guerra de las Malvinas, también nos pueden hacer creer que ser esclavos es lo mejor que no puede pasar.
Los únicos que pueden ponerle un freno a todas estas pretensiones del gobierno de precarizar el trabajo, conculcar derechos y quitar la seguridad jurídica de los trabajadores, es el movimiento obrero unido y movilizado, como lo fue la CGT bajo la conducción de Saul Ubaldini. La clase política ha demostrado una vez más su mezquindad, privilegio sus propios intereses al del pueblo, en lugar de buscar la unidad contra "un monstruo que pisa fuerte", con habilidad manipuladora, desvergüenza para mentir y armar componendas, se encapricharon en los cargos y su propio egoísmo pudo más que la necesidad de la gente. Sabemos – también - que siempre hubo sindicalistas que se acomodaron al calor del poder y negociaron a los trabajadores, es por ello que hay que buscar la unidad de la base más que la de los dirigentes en esta lucha. El movimiento obrero tiene capacidad de movilización y poder para defender los derechos de los trabajadores, que han costado tiempo, lucha y sangre conseguir. Por la memoria de los compañeros que ofrendaron su vida por las conquistas se debe ganar la calle y ponerse a la cabeza de los reclamos sin titubeos ni claudicaciones, en esto no se puede retroceder. Se debe deponer intereses personales y sectoriales, si los dirigentes no están a la altura de las circunstancias o no están dispuestos a luchar por los trabajadores deben dar un paso al costado, aquí se debe privilegiar la unidad sobre cualquier otra cosa. Además estas medidas vienen cargadas de represión para generar miedo y silenciar el reclamo de aquellos que lo hacen individualmente. Si no se para ahora, va a ser tarde, ya que este gobierno de CEOs tiene muy claro ir en contra de la herramienta más fuerte que tienen los trabajadores, que son sus organizaciones gremiales y así poner de rodillas a los trabajadores.


Héctor Daniel Fernández

Octubre de 2017 

SON MUY PELIGROSOS

    Mientras estos personajes fanfarrones, patéticos y cobardes se disfrazan para jugar a la guerra y a los soldaditos, creen que todo es co...