A medida que nos aproximamos a
unas nuevas elecciones PASO en agosto y generales en octubre 2017, comienza a
verse los distintos movimientos de dirigentes tratando de acomodarse. El
Peronismo, luego de la derrota electoral de 2015 está tratando de reacomodarse,
como para reafirmar lo que tiene y avanzar sobre el oficialismo o sea sobre Cambiemos.
En la Provincia de Buenos Aires,
como se ha dado a llamar, la madre de todas las batallas, hace un tiempo que se
viene trabajando para armar un frente común o por lo menos aunar criterios para
enfrentar a un Gobierno que viene imponiendo una matriz socio económica neo
liberal, donde ha privilegiado a los que más tienen en detrimento de los que
menos poseen (para no explayarme ver: http://lzrsocialypopular.blogspot.com.ar/2016/11/historia-repetida.html).
Este gobierno compuesto por empresarios (Ceos), manejan el Gobierno como una
empresa y por ende están haciendo buenos negocios, por supuesto como no podría
ser de otra forma, beneficiándose ellos. Parecería que para el sector “anti
peronista” de la población, estos negocios o negociados (Panamá Papers, Low
Cost, Correo Argentino, Blanqueo de familiares, Memorandum Qatar, Soterramiento
del Sarmiento, Calcaterra, Caputo, Aranguren con Odebrecht, la plata de
Michetti, y siguen las denuncias, más de 50 funcionarios imputados), no son
visto como casos de corrupción, sino como negocios, sugestivo. La doble vara
con que los argentinos solemos medir las cosas (ver: http://lzrsocialypopular.blogspot.com.ar/2016/08/doble-vara.html).
Es indudable de la connivencia
con el gobierno de un sector importante de los medios de comunicación (monopólicos)
y de la Justicia, que le dan protección y forman parte de este proyecto
político. América Latina tiene esto de cumplir ciclos, gobiernos conservadores
a gobiernos de corte popular, golpes militares, gobiernos progresistas,
gobierno neoliberales, y ahora se extiende este tipo de alianzas, empresarios,
medios y justicia.
Volvamos al Peronismo y las
próximas elecciones. Es indudable que los une el espanto o sea Macri y su
política, que vienen causando un grave daño en lo social, laboral, económico y
cultural. EL triunfo del Peronismo sólo depende del propio Peronismo, o mejor
dicho de la capacidad de sus dirigentes de entender que está primero, si sus
intereses personales o derrotar las políticas neoliberales que están sumergiendo
al pueblo a una de sus peores crisis. Una ruptura en el peronismo, garantiza el
triunfo de oficialismo en las próximas elecciones y también las del 2019. Seguramente el futuro es imprevisible, se
puede cometer errores, pero esperemos un acto de grandeza de los dirigentes
para poder unirse y mantenerse así hasta las elecciones generales.
El gobierno de Macri está
perdiendo votos, y consenso social. Igualmente el oficialismo, que elegirá a
dedo sus representantes y no tendrá PASO, cosa que criticaban al peronismo,
votara unida y en caso de perder, no será por amplio margen.
Dentro del Peronismo, todo gira
alrededor de quienes van a ser candidatos a Senador y Diputados Nacionales y
Provinciales, como así también Concejales. Los intendentes quieren mantener el
control de sus cuerpos legislativos, por lo tanto elegir sus candidatos. Hoy por
hoy, Cristina de Kirchner, a pesar de la intensa campaña de desprestigio
montada por el Gobierno, los medios y una parte de Justicia (como lo hicieron
con Perón en el 55, salvando la distancia), además de errores propios, es la
persona que más intención de votos tiene en general, es por ello que muchos,
después de la derrota se habían alejado, han vuelto al ruedo. Como decía el
Gral. Perón, “detrás de mi vendrá, el que bueno me hará.” Así mismo se sabe que
Cristina tiene un piso alto y como algunos estiman, un techo bajo, como todo,
hoy por hoy es relativo.
Se sabe que algunos discuten o
presionan por definir cuanto antes el papel de Cristina, aunque es muy difícil
desconocer su autoridad, como así también, su mayor intención de votos, por
lejos. Aquellos que pretendan o necesiten conservar su espacio de poder
(Intendentes), no se arriesgaran yendo en su contra, por eso le piden una
definición. Los peligrosos son aquellos dirigentes y agrupaciones internas que
no necesitan mantener lo que no tienen, ni tiene el peso suficiente en el
armado político que ellos creen tener y que apenas ocurrida la derrota trataron
de despegarse. Estos desencantados siempre existieron, pero mientras se
mantengan dentro del mismo espacio, no apelen y recorran los argumentos del
enemigo y no provoquen una ruptura permanente, en el disenso se puede crecer.
Lo conveniente es que el espacio sea lo suficiente amplio como para contener
las más diversas tendencias y disensos, pero siempre respetando la conducción y
los principios de la ideología. También es labor y capacidad del conductor
mediante la persuasión ampliar el espacio.
En lo personal, sobre la
candidatura actual de Cristina de Kirchner, no tengo una definición clara.
Sospecho que al ser candidata el gobierno – una vez más - tratara de volver a
plebiscitar su gestión y no el presente. Aquellos que no quieren a los “kirchneristas”,
los que están desilusionados con Macri y Massa, otro candidato Peronista podría
atraer ese voto. Pero hay algo que supera todo esto y que es reconocido por la
mayoría y adhiero, que es la capacidad de Cristina sobre todos los demás que
puedan competir, de un lado u otro.
El otro punto es la presentación
de Randazzo en las PASO, y la vuelta de algunos dirigentes del Frente Renovar,
y a esto viene el título, “huelen sangre”. Ven la caída del Frente Renovador y
el Gobierno que cada mes que pasa cosecha más rechazo que aprobación por sus
políticas, hace que el Peronismo sea la única opción u oposición real, dado que
tiene una propuesta.
Permítanme una digresión, el
Frente Renovador es un hibrido, esa ancha avenida del medio, que se está trasformando
cada vez más a la Calle Angosta, la de una vereda sola. Siempre hubo dirigentes
“peronistas” que se quieren parecer a los que ganan e indefectiblemente
terminan desahuciados. Recordemos sin ir muy atrás (a los peronistas sin
Perón), aquellos que quisieron parecerse a la Coordinadora Radical de Alfonsín.
Esto es el Frente Renovador un mix entre algo del peronismo y mucho de
cambiemos. En todos los casos me quedo con el original, antes que con una pobre
imitación. Además su alianza con
Margarita Stolbizer, reconocida anti peronista, puede y debe hacer sentir la
incomodidad a los “peronistas” que aún quedan.
Retomo lo del título, hoy por
hoy, el Peronismo se planta como la antítesis de este modelo, y esto están
viendo los dirigentes, quienes el gobierno los obliga a asumir un compromiso
político de definirse de qué lado se sitúan. Además de su lógica apetencia de
ocupar algún cargo, lógicamente que no hay para todos, como cuando se era
gobierno.
Volviendo a la presentación a las
PASO de Randazzo, recordemos que en la carrera por suceder a Cristina en el
2015, era el favorito de los kirchneristas más leales, ante un Scioli que se lo
veía más parecido a Massa. La negativa
de Randazzo de bajarse para ser único candidato a la gobernación de la
Provincia de Buenos Aires, habilitó una interna violenta entre Aníbal Fernández
y Julián Domínguez, que terminó con la perdida de la provincia en manos de
María Eugenia Vidal. Esta negativa y su silencio durante un año y medio, no es
bien visto por algunos sectores del peronismo. Randazzo, seguirá manteniendo el
discurso kichnerista que tenía cuando competía con Scioli?. Lo importante es
que lo hagan por dentro del peronismo y salden sus diferencias con Cristina y
si pierden la interna, los dirigentes “no saquen los pies del plato”, y sigan
pensando que el enemigo es Macri.
Perón decía que una cosa es la
ideología y otra la doctrina, la ideología son su valores y banderas, justicia
social, independencia económica, soberanía política, dignificar al hombre y el
trabajo. La doctrina es la que debe evolucionar según las circunstancias,
actualizarse y adecuar su lenguaje y propuestas a estos tiempos.
Con este análisis superficial, no
quiero decir que por aquí pase la solución para revertir estas políticas
neoliberales, simplemente estoy tratando de hacer un análisis del
comportamiento del dirigente peronista y él momento que se vive dentro del
peronismo. Como así también, estoy convencido, que se debe construir la unidad
bajo un acuerdo programático, para que no nos volvamos a encontrar con un
Bossio o Pichetto y algunos otros. (Ver: http://artepolitica.com/comunidad/los-kirchneristas-existen-pero-el-kirchnerismo-no/).
El gobierno de Macri vino a
producir un cambio estructural en la sociedad, en sus costumbres y sus valores.
Por medio de la muy buena capacidad de comunicación pretenden convencernos de la
“pesada herencia”, que ha llegado la hora del sinceramiento, que nuestra
sociedad se ha acostumbrado a vivir por encima de sus posibilidades, sino que además
cree que los beneficios heredados forman parte de sus derechos. Que con este
ajuste se ordenara el País del despilfarro y la corrupción, además de
desprendernos del paternalismo estatal. Nos quieren persuadir que debemos
atravesar este dolor del ajuste para pagar la “fiesta” del pasado, por ser
partícipes de una vida irreal que no nos correspondía. Para ellos nuestro
pecado ha sido creer que se podía vivir dignamente, crecer socialmente y
alcanzar un modesto bienestar, hoy nos hacen expiar ese pecado.
En cualquier circunstancia, el
Gobierno ira por todo, ahora de no ganar las elecciones y tener un Congreso que
no se venda, no se compre o se deje extorsionar, se podrá poner algún freno a
las medidas que perjudicaran al pueblo en general: flexibilización laboral,
ampliación de la edad jubilatoria,
Congelamiento de salarios,
vaciamiento de todas las cajas del estado y el Anses, endeudamiento, mayor
apertura de importaciones, entre otras medidas. Incluso, al perder poder la
justicia actuará en algunos casos de corrupción oficial, de distinta forma.
Sabemos que esta “justicia” es fuerte con el débil, y débil con el fuerte.
Ahora para revertir esta
situación se necesitará un cambio profundo, revolucionario, constitucional, estructural
y cultural. (Ver http://lzrsocialypopular.blogspot.com.ar/2016/08/una-democracia-agotada-y-un-ciclo.html).
Hector Daniel Fernández - Mayo
2017