martes, 21 de julio de 2020

NO CREO EN LA RESPONSABILIDAD INDIVIDUAL


El Sr. Presiente, el Jefe de Gobierno y el Gobernador de Buenos Aires, el último viernes 17 cedieron la responsabilidad a los ciudadanos de cuidarnos en esta pandemia del Covid 19 cuando estamos en el llamado pico. No está mal si hay una sociedad concientizada y respetuosa. 

Veo que se va detrás de lo que hace la “gente”. Se libera porque casi nadie respeto el ultimo aislamiento social, preventivo y obligatorio (Ciudadela).

Acepto que ya se hace muy difícil soportar tanto tiempo de encierro (lo padezco), además de los problemas económicos de la mayoría de la población. Pero permítanme NO CREER EN LA RESPONSABILIDAD INDIVIDUAL. Porque a pesar que muchos se esfuerzan en ser solidarios y ayudar a muchas personas vulnerables, han convertido una sociedad individualista, egoísta e indiferente que solo piensa en ellos y no les importa el otro. Se venera lo superficial demostrando la decadencia del alma. Existe una pobreza espiritual de una sociedad que minimiza la muerte de sus ancianos, motorizada por algunos medios que comunicación y políticos.

Estos días, con el permiso de salidas escalonada, he visto a cantidad de personas amontonadas en parques violando las normas impuestas, saliendo sin resguardo, sin cumplir los protocolos u otros haciendo fiestas y escasamente personal controlando y haciendo cumplir las normas. Está bien que los jóvenes son los que menos riesgos corren, pero ellos pueden contagiar a sus padres, abuelos, tíos, vecinos con mayores riesgos y llevarlos a la muerte.

Bien o mal, esta sociedad ha sido construida por esos ancianos que descartan subliminalmente, esos que hoy se han convertido en un número que miramos con cierto estupor y desde la distancia, sintiéndonos falsamente seguros de que no nos va a tocar a nosotros. Hay muchos de esos ancianos los que lucharon por muchas de las libertades que hoy disfrutan y reclaman.

 Tampoco es cuestión de tener miedo, si cuidado y respeto al virus. Lo que si reclamo a las autoridades hacer respetar las normas, cumplirlas y hacerlas cumplir.

Muchos profetizan que luego de la pandemia nada será igual, que la sociedad mejorara. Para mí, el rico volverá a su riqueza, el pobre a su pobreza, el miserable a su miserabilidad, el especulador a especular y la mayoría honesta y solidaria seguirá luchando por un mundo mejor. Nada se lograra si no hay un cambio cultural.

¿Triunfara una vez más el individualismo y el egoísmo sobre la vida y la condición humana?.

Daniel Fernández
Julio 2020


miércoles, 1 de julio de 2020

LA LIBERACIÓN ES ROMPER LA COLONIZACIÓN CULTURAL



Históricamente nuestra sociedad ha sido educada y formada por una élite adinerada y prospera, bajo una fachada de una educación eficiente y occidentalizada, burocratizando el saber y los programas de estudio, con influencia francesa de principio de siglo, para fabricar ciudadanos estereotipados y desarraigados, y sobre todo que la sociedad en general defienda y proteja los intereses de una minoría poderosa, en perjuicio propio. Ellos nos marcaron, exceptuando algunos momentos, lo que es bueno o malo según los intereses de esa élite. Fueron ellos quienes marcaron lo que es civilización o barbarie, según sus intereses.
Esta cultura, han llevado a miles de personas que se encuentran por debajo o apenas por encima de la línea de la indigencia a que se resignen, que crean que su destino o por mandato divino. La práctica neoliberal ha cortado a su vez las débiles líneas de apoyo y sustentación social desde el Estado, haciendo de éste una maquinaria de endeudamiento, despojo y represión.
Nuestra sociedad vive una crisis ética y cultural muy importante. Las minorías de poder han trabajaron constantemente para que no se pueda construir una sociedad humanista y solidaria en la cual se debe pensar en el bien común, se han opuesto a la construcción de teorías donde se ponga en el centro al ser humano y que dieran una razón para existir. Nos han querido erradicar la esperanza y fe, valores porque luchar, y en creer en un futuro mejor para todos. Muchos han preferido asumir la servidumbre en la seguridad al riesgo en la independencia. Arrastran consigo una vida material e insignificante, sin darse cuenta que no hay logro más grande para un ser humano, que oponerse a la domesticación, resistirse a la opresión y rechazar la degradación. La resignación y el conformismo se ha instalado en algunos sectores de la sociedad adulta y el desinterés y descreimiento en parte de la juventud, doblegados ante un discurso aplastante que predica que el destino de hombres y mujeres se juegan en el terreno del mercado - donde impera la ley del más fuerte y el "sálvese quien pueda" - y no en el ámbito de la sociedad, política y el Estado.
Hoy se habla con las palabras del poder. Vemos sus imágenes. Decimos sus verdades y las defendemos como nuestras. Somos lo que el lenguaje mediático ha hecho de nosotros. Se repite como propios los pensamientos del poder. Hay que romper con el miedo que el poder logra introducir en las conciencias. Hay que quebrar eso que la ideología del poder ha hecho de nuestras conciencias. Las ha colonizado.
Los comunicadores del poder fueron adiestrados para manejar los pensamientos. Colonizaron sus mentes con ideología de odio, de fanatismos invencibles y de demonizaciones sin matices. Crearon en un sector de la sociedad – propensa – que el otro es el mal, el otro no pertenece a la misma condición de “ellos”. El “otro” es la negación de todo lo que son y buscan ser.  “ellos” son el bien, la civilización, el occidente cristiano, la democracia, son los elegidos por Dios. “ellos” son seres humanos, los “otros” son el mal, la escoria, los negros, los antidemocráticos.  
Al manejar su pensamiento, lo que “ellos” son se decide en otra parte. Su destino no es el de él. No es dueño de elegir lo que quiere ser. Lo que escuchas en la radio, lee en el diario, lo ve en la tele o le dice un vecino o amigo, son otros los que eligen por él. Esos otros los manipulan o los operan en favor de esa élite de poder. En definitiva pagaran las consecuencias los ciudadanos comunes, porque los que deciden por nosotros son inhallables, son ajenos a sacrificios y perjuicios a los que nos someten. 
También hay sectores pusilánimes de intelectuales, periodistas y artistas que no han sabido buscar su propia voz en la inmensidad de influencias.
Para muchos “la cultura” es solo aquello que viene del exterior. Nunca se busca en nuestras raíces. Hay que vencer, principalmente en sectores medios, sus perjuicios de donde vienen. Quieren ser o parecer lo que no son o no serán nunca. Esto no es más que cubrir con máscaras la propia y desnuda cara. Es no comprometerse en el fondo con nuestra propia historia.
Husserl habla de la inversión de la corriente de pensamiento cotidiano, de tal modo que si veo un árbol no me conformo con la simple percepción, sino que,  al reflexionar, puedo terminar por pensar en qué consiste ver un árbol, por qué hay árboles y peor aún, por qué en suma, estoy reflexionando.
Tal como sugiere Jauretche en Los profetas del odio y la yapa: “en la Argentina, el establecimiento de una verdadera cultura lleva necesariamente a combatir la “cultura” ordenada por la dependencia colonial. Implica, por lo pronto, una revisión respecto del pasado nacida de la búsqueda de las propias raíces que obliga a restaurar el prestigio de quienes fueron sumergidos por no ingresar a las jerarquías oficializadas; el impulso que destruye los falsos héroes consagra paralelamente a otros que responden a las exigencias de una verdadera cultura nacional.”

Daniel Fernández
Julio 2020 


MI GENERAL - EL PUEBLO NO TE OLVIDA!!!!

1 de julio de 1974

El 1 de julio de 1974 moría Juan Domingo Perón, líder y creador del movimiento justicialista, y sin lugar a dudas el personaje político más significativo de los últimos 50 años en la historia de la Argentina.
“La verdadera democracia es aquella donde el gobierno hace lo que el pueblo quiere y defiende un solo interés: el del pueblo” es uno de sus lemas al que algunos olvidaron y hay que recrear firmemente para recuperar el poder.
“`No debe ser temido el triunfo de la ciudadanía; no debe ser temido porque se apoya en la razón que asiste al pueblo para reclamar la justicia que desde años atrás se le adeudaba, y en el convencimiento de que, en paz y armonía, la justicia llegará a todos los hogares en vez de pasar indiferente ante la puerta de los humildes, de los que más necesitados están de ella. He de advertir empero que esta justicia que se adeuda a los que hasta ahora no la han disfrutado, no será en desmedro de ningún otro derecho legítimo. Si así fuese, sería arbitrariedad y no justicia. No podrá prosperar tampoco el espíritu de venganza, no lo ampararán las encarnaciones del poder soberano del pueblo; no debe recurrirse a la venganza para resarcirse de lo que se ha sufrido por injusticia.” Juan D. Perón. 4/6/46. 
En sus gobiernos se reivindicó y defendió los derechos de los trabajadores, impulsó la industria nacional, incentivó el desarrollo de la actividad gremial y sindical, propulsó el voto femenino, integró a la mayoría de la población argentina a la vida política y creó un Movimiento de liberación que articulaba intereses de amplios sectores sociales, durante sus tres gobiernos la sociedad argentina fue la de mayor equidad en la distribución de la riqueza y de ascenso social.







SON MUY PELIGROSOS

    Mientras estos personajes fanfarrones, patéticos y cobardes se disfrazan para jugar a la guerra y a los soldaditos, creen que todo es co...