Estimados compañeros/as
Luego de otra derrota en las elecciones en nuestro partido de Tres de
Febrero, veo con mucha sorpresa un aparente pacto de “no agresión” con el
intendente reelecto, cosa que él y su partido no tienen con nuestro gobierno.
No ignoro que el oficialismo cuenta con mayoría en el H. Concejo Deliberante.
También que, con la pandemia, se hace complicado hacer política y quizás por
ello, se haya estableció un tipo de acuerdo para hacerle frente al virus. Pero
el Sr. Intendente siempre ha resuelto por las de él. Se guía y aplica en Tres
de Febrero las normas que adopta su aliado de CABA, el “amigo” Horacio Larreta.
Aquí nadie controla nada y cuando comerciantes se quejaron por no poder abrir,
ha dicho que son órdenes de Axel Kicillof “la provincia”. Por lo que sabemos
los que estamos en el llano, no accedió en formar un comité de crisis. Impuso,
compulsivamente, cobrar el alumbrado público en las boletas de Edenor, sin que se
conociera ninguna acción firme para oponerse. Aplico el Estacionamiento medido
en los barrios, en un momento muy difícil, sin mayores problemas ni reacciones.
Tampoco conocemos que alguien haya propuesto una moratoria amplia y generosa
para comerciantes, pequeños industriales y vecinos de Tres de Febrero que se
sienten asfixiados por la falta de trabajo y de ingresos suficientes por culpa
de la pandemia. Sólo hemos visto a compañeros, que solitariamente se quejaron y
expresaron en las redes y medios a su alcance nuestra oposición. Sentimos que
estamos solos. Lo que percibe el común
de los vecinos es que no existe una estrategia y una táctica del Frente de
Todos (en unidad), en la cual podamos encolumnarnos para enfrentar a esta
política clasista que termina por imponerse sin resistencia barrial. Estas
medidas, algunas unipersonales y otras consensuadas con su partido, terminan
afectándonos a todos. No se percibe una conducción unificada, sólo se advierte
el esfuerzo individual y la puja de intereses sectoriales. No se ve unidad de
criterio y de acción en el trabajo de base en nuestro distrito. Tampoco se nota
públicamente que contemos con una figura a nivel local o nacional con presencia
territorial y fuerza para competir y fijar posiciones a las medidas del actual
Intendente, que cuando es entrevistado en medios locales y nacionales,
oficiales y opositores, se muestra como un gran dialoguista y que aporta a la
convivencia. Además, expresando que su municipio es un ejemplo, cosa muy
alejada de la realidad. En cada entrevista, Valenzuela siempre deja sentado la
postura de su partido y no repudia a los violentos ni condena a los
desestabilizadores. Se hace propaganda con la ayuda que le dan el Gobierno
Nacional y Provincial. Tampoco es cuestión de contestar chicana por chicana,
sino llevar a una discusión política elevada. De seguir así, en mi modesta opinión, ganara
las próximas elecciones.
Ellos juegan a dos puntas. Los que ocupan cargos de gobierno, caso
Valenzuela, se hacen los dialoguistas y negocian para sacar benéficos que usan
para su favor. Mientras los que no tienen cargos gubernamentales juntos a los
medios de comunicación aliados, van constantemente al choque, son arbitrarios e
intolerantes creando un clima de caos y abatimiento, con el fin de desgatar y
esmerilar la imagen del presidente Alberto Fernández y del gobierno. Juegan a
policía bueno y policía malo, esperando recoger sus frutos en 2021 y 2023. Ellos
van a usar todo a su alcance para trabar todas las acciones de gobierno y las
leyes que el Gobierno quiera aplicar, como lo hacen en diputados. Han llamado a
la desobediencia civil y ahora “pario la abuela” la “Bonaerense” sale a la
calle y se manifiesta. ¿Debemos seguir poniendo la otra mejilla? El PJ dónde
está?
Creo, modestamente, que debemos tener dirigentes que se ocupen de
lleno a los problemas de Tres de Febrero, que sean una verdadera contra figura.
Se debe “caminar” en la “medida de las posibilidades” los barrios o usar las
nuevas tecnologías para reunirse con las fuerzas vivas de cada zona “para
escuchar”. Los concejales que “puedan” deben estar en los barrios, reunirse con
los vecinos, como lo hacían en la campaña. Los concejales son representantes de
los vecinos principalmente, no de una corriente interna o un partido, deben
actuar en unidad. En campaña los aspirantes a cargos recorren los barrios, se
reúnen con organizaciones civiles, sociales, comerciales, empresariales,
vecinales, etc. Ahora pasada las
elecciones somos nosotros los que tenemos que ir a buscarlos cuando tenemos
problemas. Quizás uno sea utópico, pero siempre creí que se militaba por un
ideal y no para alcanzar un cargo. Los cargos son tan solo un elemento para
lograr mejorar la vida de los demás y no la propia. Creo fervientemente en el
travasamiento generacional, no como salida laboral, sino el deseo de no pasar
por la vida sin colaborar con una gran causa, con generosidad, participación y
por la rebelión del mundo de los postergados.
Siguiendo con mi humilde opinión, pienso que, si se quiere recuperar
el Municipio, no se puede competir con las mismas armas que nos ofrece el
oponente, ellos tienen todas de ganar. Tampoco se gana solo con críticas a la
gestión. Hay que buscar opciones superadoras, propuestas y soluciones a los
problemas cotidianos, ofrecerles a los vecinos una opción que esté por encima
de la media y sobre todo que esté junto a ellos cuando lo necesitan. De nada
sirve entusiasmar y convencer a los convencidos, sino a los indecisos de
siempre.
Todo es discutible y mejorable. Nosotros propusimos llevar la política
al barrio. La constitución de Consejos Vecinales Barriales, integrado por todas
las fuerzas vivas de cada barrio, donde sean ellos quienes marquen sus
necesidades y prioridades. Que se gobierne escuchando a los vecinos y no de
espalda a ellos.
http://lzrsocialypopular.blogspot.com/2019/06/llevar-la-politica-al-barrio.html
Decíamos en nuestro documento: “Creemos que la descentralización de
las funciones estatales, autogestión, delegación de soberanía a unidades
menores o vecinales, descentralización de actividades públicas o modalidades de
representación más próximas a los actores sociales, es un paso adelante y
superador. Es necesario producir formas de organización de la sociedad mucho
más personalizadas y visibles en todos aquellos procesos y decisiones que
afectan a la mayoría de los vecinos. En nuestros días, se encuentra
generalizada la percepción de que cuando los gobiernos locales deciden lo hacen
desde niveles demasiado lejanos y poco visibles para el vecino común. Decrece
la legitimación o esta se convierte en una aceptación pasiva. La problemática
existe entre la cercanía y distancia que mantiene el poder con aquellos a
quienes demanda obediencia. Ha cambiado la relación del pueblo con los que
dicen ser nuestros representantes y aquel que no entendió el mensaje puede
pagarlo muy caro.” Que esto no suene a amenaza. Simplemente que ayude a ganar
las próximas elecciones. “Se hace
necesario un cambio de actitud a los efectos de abrir al ciudadano la mayor
cantidad de canales de participación real y control de gestión, de lo contrario
los daños a la sociedad y credibilidad serán irreparables y traerán aparejados
conflictos muchos más serios. Es
necesario recrear una democracia mucho más participativa y directa, donde la
voluntad popular sea consensuada y respetada.”
Participe en algunas reuniones en Ciudadela en las que estuvo Juan
Debandi y otros compañeros, en el Foro de Políticas Públicas, exponiendo lo
mismo, teniendo mucha aceptación entre los participantes, también le ofrecimos
toda la experiencia de nuestro trabajo social en Ciudadela. No he visto que
alguna propuesta presentadas se tuviera en cuenta. Quizás sean descabelladas o
no sea políticamente correcto. También puede que seamos unos delirantes,
alejados de la real política que se maneja en las internas.
No tengo mayores expectativas con estas reflexiones. Algunos amigos y
compañeros han leído esta carta, en general están de acuerdo, pero todos coincidieron
que es sembrar en el desierto. Creo que más vale encender una vela que
despotricar en la oscuridad.
Les dejo la visón de lo que ve un vecino que hace 71 años que vive en
el barrio, que camina a diario sus calles y observa con angustia su deterioro y
sus necesidades. Seguramente mi mirada sea pequeña y sesgada, pero es una
realidad que vivo a diario y comparto con otros vecinos en el territorio.
Tengo ya 71 años y un largo recorrido, milite en la Unidad Básica Dr.
Ramón Carrillo de Gaona y 9 de Julio desde los años 70. Luego en Gaona y 25 de
Mayo en 1983 y un leve paso por su continuidad en Propuesta Peronista. Fui
delegado gremial y miembro de la Comisión Directiva del Sindicato de la Junta
Nacional de Granos en los años 70. Luego fui empleado y asistente del
Secretario General de la Federación de Obreros y Empleados de la Industria del
papel, cartón y químicos. Cro. Blas Juan Alari por 26 años. También soy un
miembro más del Cabildo Abierto del Pueblo de Ciudadela, entre otras
actividades sociales. Seguramente a muchos los he molestado haciendo llegar mis
escritos:
http://lzrsocialypopular.blogspot.com/
Unidos sería mucho más fácil.
Septiembre 2020