Los políticos en general y los de este gobierno
de “Cambiemos” en particular que tienen su vida resuelta, las de sus hijos y
nietos por lo menos, viven exigiendo esfuerzo y sacrificios a los jubilado,
después de toda una vida de trabajo. Cuando deberían disfrutar de sus últimos
años en plenitud y con felicidad, se los carga de angustia, impotencia,
restricciones y prohibiciones.
Para este sector que hoy nos gobierna, el
jubilado es un estorbo, son los que desequilibran las cuentas del Estado, son
los que "se llevan de los montos más grandes de todos" (Michetti), se
los acusa de cobrar mucho y de vivir muchos años, además son los que hacen el
sistema insustentable.
También los quieren cuidar, por eso dicen que
deben trabajar más años para conservar su mente y cuerpo sano, con esa escusa
amplían la edad de jubilación para tener “menos gastos” y poder pagar la deuda a
especuladores. Si todos los jubilados fueran como ellos, no habría problemas,
pero no es lo mismo ser un obrero de la construcción, un obrero de una fábrica
metalúrgica, de la zafra, de la cosecha, de las mineras, de los pozos de
petróleo, sólo por decir algunos ejemplos de los muchos que hay. Además
proponen trabajar hasta los 70 años, pero te quedas sin trabajo a los 50 años y
no conseguís un trabajo porque sos “viejo”. Incoherencias de este sistema.
Aportas toda tu vida de trabajo, y luego no hay plata para jubilaciones dignas.
Condonan deudas previsionales a empresarios y les bajan los aportes para hacerlos
competitivos y desfinancian el ANSES que es quién les paga a los jubilados. Con
la política económica que aplicaron han cerrado miles de empresas y comercios,
hay miles de desocupados, y la capacidad instalada cayó al 56,6 por ciento, que
también afecta la recaudación del ANSES. Esquilman el Fondo de Garantía de
Sustentabilidad para cubrir el déficit del gobierno.
La calidad de vida y poder adquisitivo – de los
jubilados - han disminuido a niveles de hace más de 30 años, con ingresos
francamente miserables. En 6 años se ha perdido el 40% del poder adquisitivo. Se
cobra en devaluados pesos, y se pagan servicios y mercaderías a valor dólar. Por
más que algunos mientan o pretendan hacernos creer otra cosa, estamos últimos
en el mundo en calidad de vida de los jubilados. Lamentable honor. Hoy la
jubilación mínima apenas supera los 238 dólares, y el promedio con suerte los
U$S400 (sin contar los privilegiados que oscilan en los U$S10.000). El 84% de
los jubilados percibe menos de dos haberes mínimos (Marcos Peña). Casi el mismo
monto que cuando Norma Plá (U$S220) enfrentó a Domingo Cavallo.
Todo esto pasa por que tenemos una sociedad
culturalmente indiferente, insolidaria y egoísta, porque no protege ni defiende
a sus ancianos. Se ha naturalizado que los jubilados sean pobres. Nos han
inculcado culturalmente pero maliciosamente, como si tuviéramos el don de la
juventud eterna, que nunca llegaremos a viejos, que nunca dejaremos de tener
vitalidad y trabajo, que nunca tendremos enfermedades, por eso no nos ocupamos
de los mayores como debería ser.
El recorte presupuestario en
seguridad social ha sido una política de Cambiemos desde un comienzo. Ahora,
con la presión fiscal que establece el FMI, el ajuste será más profundo. Como
en los ‘90, la herencia para los jubilados que deja otro gobierno neoliberal
será costosa de levantar.
Estoy convencido que tanto Macri, Michetti, Fraga
y muchos integrantes de este gobierno, como del sector social que los apoya, si
pudieran aplicarían a jubilados y discapacitados que no tengan recursos
suficientes para valerse por sí solos, el plan de exterminio de los nazis
(Aktion T4).
Expliquemos lo que
dijeron en campañas los que nos gobiernan y lo que hicieron:
Esto prometió el gobierno:
"Aquellas sociedades que no protegen y se
preocupan por los que antes nos cuidaron a nosotros, es una sociedad
profundamente injusta y desagradecida".
Vamos a reformar el PAMI para que de una vez por todas brinde un
servicio de calidad.
Todos aquellos jubilados que cobren la jubilación mínima recibirán
sus medicamentos completamente gratis.
No va a haber ningún abuelo en la pobreza.
Vamos a garantizar que cada persona de más de 65 tenga un ingreso
mensual, sin importar que no tenga hechos los aportes.
Después de tantos años de esfuerzo y trabajo, vamos a garantizar
que todos los jubilados reciban la ayuda necesaria para que puedan vivir
tranquilos y disfrutar de esta etapa de la vida.”
Es un compromiso concreto el 82% móvil para los jubilados.
Escucha
todas esas promesas, no es relato:
Estos es lo que hizo el gobierno:
El cambio en la fórmula de
movilidad previsional y la
disparada inflacionaria explican el deterioro en la capacidad de compra de los
adultos mayores.
Pobreza e Indigencia: Canasta básica de un jubilado es de: Por la disparada de los
precios de los alimentos, remedios, alquileres y servicios de la vivienda, la
canasta básica de los adultos mayores o jubilados ya vale $ 26.043,39
mensuales. Hoy hay más de un 70% de jubilados y pensionados sin poder cubrir
estas necesidades básicas. Mientras que una familia tipo para no caer en la
pobreza requiere $ 25.206,03, informó hoy el Instituto Nacional de Estadísticas
y Censos (Indec). Para no caer una familia tipo en la indigencia necesita $
10.122,9.
Por lo tanto los jubilados que cobran
la mínima son INDIGENTES, incluso si perciben 2 haberes mínimos.
El 70 % perciba haberes por
debajo de la Canasta de los Jubilados.
Las jubilaciones necesitarán una recomposición de
14,5% para nivelar la brecha respecto de la inflación a lo largo de 2018, que
no van a dar. Tampoco dieron un Bono para los jubilados para compensar la
pérdida. La
jubilación mínima arrancó 2018 en 7246 pesos y ahora está en 9300 pesos, una
suba del 28,3 por ciento.
La
mayoría de los trabajadores y trabajadoras que se jubilan "caen"
inmediatamente en la pobreza, mientras un puñado de jueces, obispos y
funcionarios perciben jubilaciones de privilegio, superando los $ 200.000
mensuales. En el mejor de los casos, para aquellos asalariados “en blanco” que
alcanzan a jubilarse, la relación promedio entre la jubilación y su último
salario es menor al 60 %, muy lejos del 82 % móvil que prometieron.
Reforma
Previsional: En
diciembre de 2017, el gobierno de Macri dio su mayor estocada a los jubilados
con la llamada “Reforma Previsional”. Esta implicó un recorte a las
jubilaciones y pensiones mediante una nueva fórmula de movilidad previsional y
también permitió dar pasos en la extensión de la edad jubilatoria habilitando
el tiempo de trabajo “legal” hasta los 70 años. Su único objetivo, explícito y
consensuado con los gobernadores mediante el llamado “Pacto Fiscal” de 2017,
fue reducir las jubilaciones.
Aumento
de medicamentos: En la
Argentina viven casi 7 millones de personas mayores de 60 años. Sólo durante
2018, los 50 principales remedios subieron su precio un 53 % promedio. En este
sentido, el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) advirtió que el precio
de los medicamentos del 2015 al 2018 aumentó un 235 %, en tanto que algunos
fármacos esenciales se incrementaron más del 534 por ciento. En contraste, la
jubilación mínima actual es de 9.309 pesos y en el 2015 la primera movilidad
anual la llevó a un importe de 3.821 pesos, siendo el aumento del periodo mayo
2015 a diciembre de 2018 de un 143,63 por ciento.
Restricción
a los medicamentos gratuitos: La Resolución N° 005 de PAMI, que agrega condiciones
extremadamente extraordinarias (tener ingresos inferiores a 1,5 haberes
previsionales mínimos, no estar afiliado a un sistema de medicina pre-paga, no
ser propietario de más de un inmueble, no poseer un vehículo de menos de 10
años de antigüedad, no poseer aeronaves o embarcaciones de lujo) para poder
acceder al subsidio del 100 % de cobertura en medicamentos, lo que se traduce
en una disminución del acceso de jubilados/as a esta prestación. La restricción
de los medicamentos gratuitos es una barbaridad. “Están considerando rico a un
jubilado por tener un autito modelo 2007 o al que se pudo comprar una casita en
Las Toninas con alguien que tiene aeronaves y barcos de lujo. Estos últimos,
son sólo 51 personas y por eso perjudican a más de un millón y medio de
jubilados. Las irregularidades en el Pami se van a terminar cuando el organismo
pase a ser gobernado por los trabajadores y los jubilados en un directorio como
dice la ley.
Además
el PAMI redujo la lista de medicamentos que se proveen - por razones sociales -
los cuales eran gratuitos para los afiliados. De esta forma, remedios que
tenían bonificado el 100% de su valor ahora lo tendrán solo en un 50 u 80%,
según el caso. Entre ellos se encuentran varios antibióticos, drogas para la
hipertensión, anticoagulantes, antiinflamatorios y antibióticos.
Corte
de Servicios: El PAMI frenó la provisión
gratuita de anteojos, eliminó programas de prevención de enfermedades típicas,
redujo las prestaciones de trasplantes y limitó la cantidad de alimentos que se
entregan a los centros de jubilados. Así es que faltan prótesis y medicamentos,
hay demoras de hasta seis meses en la entrega de sillas de ruedas y audífonos y
hay cortes de servicios. Modificó el sistema de pago a las clínicas y
profesionales, provocaron una contracción de más del 30% de los estudios de
diagnóstico. Si hay a alguien a quien le han desorganizado la vida es a los
jubilados. Como parte de los recortes, les escatiman los turnos, siendo cada
vez más difíciles de conseguir. Todo en nombre de la “eficiencia
administrativa”. Una muestra de esta ineficiencia e insensibilidad fue cuando
instrumentaron el sistema inverso y perverso de primero quitar las pensiones
por viudez, y luego exigirles que vayan a demostrar su condición regular. La
abrumadora mayoría que tenía todo en regla, fue sometida a ese maltrato injusto
e innecesario. Pero la peor parte se la llevaron los que sufrieron algo peor
que este manoseo: lo que fueron abusados con la quita de la pensión.
Se apoderan de los fondos de los Jubilados: El Estado (el gobierno) saca
dinero del ANSES, del Fondo de Garantía y Sustentabilidad (FGS) y del PAMI
(violando normas vigentes), incluso hasta para dar préstamos a empresas
extranjeras. En dos años se perdieron más de U$S.1.000.000.000 por malas
inversiones y las devaluaciones, mientras que la Reforma Previsional se llevó
$100.000.000. Nos representó perder el 9,4% de nuestros ingresos. Nos quitaron
el turismo social y muchos servicios de salud.
A partir de mayo de 2019 se
empezarán a utilizar los recursos del Fondo de Garantía de Sustentabilidad
(FGS) de la ANSES para liquidar jubilaciones. Es decir, el Gobierno echará mano
a un ahorro de trabajadores argentinos de más de tres décadas para gastos
corrientes. Es otra caja de la que se apropia Cambiemos en su programa de
ajuste permanente. Lo hace la fuerza política que en la oposición aprobó una
ley de jubilación mínima que imponía el 82 por ciento móvil. En tres años de
mandato no solo exhibe un duro golpe sobre el poder de compra de los haberes,
sino que hipoteca el futuro de los próximos jubilados con la licuación del FGS.
Pero
también hay reformas menos perceptibles o publicitadas, como el avance en la
venta gradual de los activos del FGS, que fue acordado con el FMI para obtener
el crédito stand by, y que se logró gracias a los votos peronistas que lo
aprobaron en el Presupuesto 2019.
Vacían
el ANSES: Al mismo
tiempo, se condonaron deudas e impuestos a los evasores y a las grandes
empresas y se disminuyeron las contribuciones que pagan las patronales,
desfinanciando a la ANSES y la recaudación fiscal.
Impuestos
a las ganancias: Por el cambio implementado por Anses en los criterios para la
retención del impuesto a las Ganancias a partir del mes de enero, otros 47.600
jubilados y pensionados deberán pagar el tributo, generando un ingreso de 1.600
millones anuales para el Estado, según estimaciones de la Oficina de
Presupuesto del Congreso (OPC).
Además
de ello, han puesto un impuesto al plazo fijo, así que si un jubilado pudo
ahorrar unos pesos en época de bonanza, ahora deberá pagar este nuevo impuesto.
Los beneficios son solo para los poderosos.
Se acabó la moratoria: Otro elemento central de la nueva política previsional es el fin
de la moratoria (cuyo nivel de cobertura llegó al 98 por ciento en 2015), dando
lugar a la creación de una pensión universal para el adulto mayor que no cuenta
con los aportes suficientes, constituida por el 80 por ciento del valor del
haber mínimo. El derecho a una jubilación como era habitual solo les
corresponde a los jubilados con 30 años de aporte o más.
El fin de la moratoria
previsional afecta fundamentalmente a los trabajadores y trabajadoras
informales, pero muy especialmente a las mujeres.
El gobierno de Macri directamente
eliminó las moratorias y creó la Pensión Universal para el Adulto Mayor. Esta
pensión, que acabará percibiendo la mayoría de las y los trabajadores en la
vejez debido a que cada vez más personas no alcanzan el requisito de 30 años de
aportes para obtener una jubilación ordinaria, consiste en un ingreso aún más
bajo que la jubilación mínima (80 %) y de hecho eleva la edad jubilatoria de
las mujeres hasta los 65 años.
No es un problema individual ni
una responsabilidad del trabajador no haber podido acreditar los 30 años, como
pretenden imponer las ideologías de la “meritocracia”, sino todo lo contrario,
es la forma en que las patronales hacen sus ganancias.
En
este sentido, la nueva política previsional implementada por Cambiemos es
fuertemente regresiva y excluyente.
Reparación
Histórica: Al mismo
tiempo, con la “Reparación Histórica” se propuso bajar el costo de las
jubilaciones que debían ser recalculadas. En la práctica, muchos jubilados
decidieron acogerse a la Reparación aunque el aumento de la jubilación sea muy
pequeño, ante la incertidumbre de no poder obtener un juicio favorable antes
del fallecimiento, frente a la lentitud de la justicia.
Esto
es lo que se bien
El gobierno plantea que la
reforma es necesaria porque el sistema es "insustentable". Este no es
más que un resultado “autocumplido”, pero no por la vía del “gasto”, sino por
el recorte de recursos, producto del desfinanciamiento permanente de la ANSES,
la reducción de contribuciones y pérdida de recursos tributarios, así como la
venta de los activos del FGS para pagar intereses de deuda a los especuladores
y no para su uso como un verdadero fondo de reserva de las pensiones.
Recomendaciones del FMI: “incrementos en la edad de jubilación, endureciendo
las reglas para acceder a los beneficios o reduciendo el tamaño de las
jubilaciones a través del ajuste en las fórmulas de cálculo de los beneficios”. En la Casa Rosada analizan poner sobre la mesa un análisis de las 3
millones de jubilaciones que se entregaron por moratoria y estirar la edad jubilatoria
de los 65 a los 70 años,
una opción que el Gobierno ya abrió como voluntaria. Los funcionarios son
conscientes de que ambas medidas generarán un golpe en la imagen de Mauricio Macri para
las elecciones presidenciales del año próximo, por lo que ya fueron preparando
el terreno para los anuncios.
Finalmente, el FMI planteará la
creación de un nuevo régimen de jubilación privada. En ese régimen que se
perfila, quedarán como jubilados de primera aquellos trabajadores formales que
además de reunir 30 años de aportes en el sistema de reparto, coticen en las
nuevas AFJP un plus para la vejez, con beneficios impositivos para aportar a un
seguro de retiro. Los jubilados de segunda serán los que tengan 30 años de
aportes. Los de tercera los que se jubilaron completando años mediante
moratorias. Y los de cuarta serán los que accedan al beneficio universal de la
Puam.
También podría haber nuevos
cambios en la ley de movilidad y en la fórmula de cálculo del haber inicial,
cuando una persona se retira, pasando de computar los últimos 10 años de
aportes a los últimos 25.
Se intentarán eliminar los
regímenes especiales, en particular el de docentes y científicos.
Dujovne: “Nos piden que demos de
baja las jubilaciones que el kirchnerismo dio con las moratorias”
Lagarde sostiene que “los
ancianos viven demasiado y hay que hacer algo ya”.
Daniel Fernández
Febrero 2019