Algunos beneficios y desventajas
Esta pandemia ha puesto en
evidencia una serie de problemas estructurales que viene teniendo el País y que
estaban ocultos para algunos. El impacto mundial del COVID-19 en el mundo del
trabajo tiene efectos de gran alcance, “llevando a millones de personas al
desempleo, al subempleo y a la pobreza laboral”. La caída de la economía
renueva la discusión en torno a la necesidad de implementar políticas para
garantizar un piso de bienestar a quienes queden fuera del sistema.
Muchos sostuvieron que de esta
pandemia íbamos a salir mejores. Personalmente no creo y lo he dicho. La
mayoría de los seres solidarios, bondadosos y honestos reforzaran sus
convicciones. Pero un sector minoritario, pero poderosos, de individuos
miserables, aumentaran su miserabilidad y su desprecio por la vida de los
otros.
A lo largo de la historia las
distintas epidemias han afectado y modificado las relaciones personales y el
trabajo. Desde hace unos años algunos trabajadores comenzaron a desarrollar sus
tareas bajo la modalidad del “teletrabajo”. Si bien la proporción de
trabajadores de manera remota continúa siendo menor que en forma presencial. La
emergencia global causada por la propagación del COVID-19 obligo a gobiernos y
empresas a implementar cambios drásticos en las dinámicas de trabajo para
evitar la circulación y el contacto físico de las personas y así reducir la
curva de contagio del virus.
Los Sindicatos industriales son
los que menos tienen trabajadores realizando teletrabajo, dada su forma de
producción la mayoría lo hace en forma presencial. Es por ello que no se han preocupado
en demasía por esta situación. Por lo general, en estos gremios los afiliados administrativos
o empleados, proporcionalmente son menos que los obreros. Suele ocurrir, al
tener menos afiliados administrativos, que los sindicatos no representan de igual
forma y ahínco que a los obreros y los empleados no se sienten representados
como corresponde. También existe muchos “administrativos” no se quieren
identificar con los “obreros”. Prejuicios clasistas. Es una separación que
atenta con el poder que puede tener un gremio para mejorar su negociación con
la patronal.
La mayoría de los Sindicatos que
sus afiliados trabajan por teletrabajo, en esta pandemia, son de los gremios de
servicios.
Para las empresas, esta modalidad
la ven favorable para evitar la agremiación de los trabajadores y conflictos
sindicales. Dado que al estar aislados cada uno en sus casas, el contacto entre
compañeros o delegados es mucho menor. También se evitan reuniones en los
lugares de trabajo que generalmente llevan a conflictos o demandas por mejoras
salariales o laborales.
Veamos algunos beneficios y desventajas,
tanto para empleados y empresarios.
Empleados
Si bien esta modalidad de trabajo
esta desde hace años, la pandemia, ha cambiado drásticamente la cantidad de
personas que comenzaron a realizar tareas remotas. Por ello el mayor problema
es que muchos empleados pocas veces habían trabajado en forma remota o no lo
habían hecho nunca. Para los novatos en el ambiente del trabajo remoto, la
experiencia al principio puede parecer una idea genial, pero pronto aparece el
aislamiento y no siempre es fácil de conllevar. Además no todos tienen el
espacio físico y adecuado para trabajar desde la casa.
Esta modalidad de trabajo, permitió
a miles de trabajadores evitar horas de traslado, estar más tiempo junto a su
familia, y obtener cierta flexibilidad para otros compromisos no laborales. Menor
gasto en comida e indumentaria. En algunos casos ha permitido mayor tranquilidad
porque ha podido ajustar los horarios laborales a las necesidades de su vida
personal, además se puede trabajar desde cualquier lugar. Según la encuesta de
Adecco, dice que 6 de cada 10 encuestados afirman que trabajan más relajados
desde su casa que en la oficina. Para el 28% es lo mismo y para un 11% trabajar
desde el hogar le resulta más estresante. Sin embargo, aunque trabajar desde
casa tiene sus ventajas, también resulta, con el tiempo, una preocupación la
soledad y la reclusión. Se hace necesario las relaciones sociales.
Como contra partida a los
beneficios, la mayoría trabaja más horas que cuando lo hacían en forma
presencial y se ven forzados a horarios y demandas que exceden su jornada
laboral, como así también a una mayor exposición a la precarización y quita de
sus derechos laborales. Algunos han perdido el pago por refrigerio o comida. Por
más que trabajen más horas no se les abona extras. Han tenido que afrontar
mayores gastos de luz, gas, servicio de internet, que no son reconocidos.
Muchos luego de esta nueva
experiencia, aceptaría trabajar con un modelo híbrido (parte en casa-parte en
la oficina). La necesidad de sociabilizar con sus compañeros y el agobio de
estar todo el día encerrado en su casa y que lo contactaran de las empresas a
cualquier hora del día, han producido una cierta saturación.
La mayoría de los trabajadores,
además de readaptar su vida a la nueva modalidad, también debieron readaptar
sus hogares. Algunos les costó adaptarse por factores económicos y falta de
espacio. Tampoco recibieron ningún tipo de ayuda de su empleador para equipar
su lugar de trabajo.
¿Qué beneficios esperan los
empleados que hacen Home Office? Sillas y escritorios, Pago de Internet, Pago
de servicios, Mayor flexibilidad de horarios y desconexión digital.
Empresas
Las empresas lograron evitar los
costos que representan la infraestructura y los servicios dispuestos para sus
trabajadores. Muchas empresas de poder seguir con este sistema han pensado en
arrendar o desprenderse de importantes oficinas. Hay menor ausentismo.
Comunicación continúa con los trabajadores.
Alegan tener dificultades para
controlar la productividad y organizar el trabajo en equipo. Igualmente, la
encuesta de Adecco dice que: Un 58% de los consultados aseguraron que en las
compañías continuará la modalidad del Home Office durante 2021, un 17% remarcó
que vuelven a la oficina, en tanto que el 25% explicó que todavía no hay una
decisión tomada al respecto.
Digamos que las mayores cámaras
patronales expresaron sin reparos su
inclinación a la flexibilidad laboral. Los mayores grupos económicos locales manifestaron
una “profunda preocupación” por la nueva Ley, señalado que la Ley de Contrato
de Trabajo era suficiente para regular esta nueva modalidad de trabajo. Pretenden
evitar cualquier regulación sobre el derecho laboral. Lo que plantean es la
discusión en los Convenios Colectivos de Trabajo, donde pueden ejercer una
mayor presión sobre los gremios que no son tan fuertes o que no tienen
mayormente afiliados administrativos.
La magnitud y lo complejo de la
pandemia del Covid-19 ha replanteado gran parte del estilo de vida y modelos de
democracia actuales y nos obliga a comprender la compleja relación entre
política, economía, salud y medio ambiente: desde la necesidad de repensar los
sistemas alimentarios, las formas de consumo y la gestión de los recursos
naturales, así como las deficiencias en los sistemas de salud y de protección
social de los trabajadores. La pandemia acelero el futuro en la forma de
trabajo.
Es indispensable la búsqueda de
un equilibrio del poder entre Estado, capital y trabajo. Un Estado fuerte,
independiente y dinámico es fundamental para mediar en la siempre e inevitable
contraposición de intereses entre el capital y el trabajo. El capital intentará
maximizar sus ganancias, en tanto las organizaciones de los trabajadores fuertes,
podrán poner freno a su avance mediante el establecimiento y defensa de los
derechos laborales.
LEY 27.555
Recientemente aprobada, la ley
27.555 tiene como objetivo ordenar esta forma de trabajo que creció
exponencialmente en tiempos de pandemia.
¿Cuáles son los puntos más
destacados de la ley de Teletrabajo?
Entrada en vigencia: será a
partir de los 90 días una vez finalizado el aislamiento preventivo, social y
obligatorio. Por medio de una resolución
el Ministerio de Trabajo estableció que comenzara a regir a partir el 1 de
abril 2021.
Opción voluntaria: el paso de un
trabajador que realiza su tarea de modo presencial a hacerlo en modo remoto
debe ser voluntario y debe quedar el compromiso por escrito. Pueden existir
excepciones de fuerza mayor que deben acreditarse.
Horarios: la jornada laboral debe
ser pactada entre ambas partes, debe figurar en el contrato laboral y respetar
las leyes vigentes.
Derecho a la desconexión digital:
la vida del homeoffice a veces corre los límites, por eso esa ley establece que
no existe una obligación a contestar por fuera del horario laboral pautado. Del
mismo modo, se deben respetar sus licencias.
Tareas de cuidado: quienes tengan
a su cargo menores de 13 años, personas con discapacidad o adultos mayores
deben tener la posibilidad de tener horarios que sean compatibles con sus
actividades de cuidado.
Reskill: el empleador debe
garantizar la capacitación para que el colaborador pueda manejar las nuevas
tecnologías.
Equipamiento: el empleador debe
proporcionar las herramientas de trabajo, tanto de hardware como de software.
También debe dar el soporte necesario para el desarrollo de las tareas, así
como asegurar la instalación de los equipos y asumir sus costos, lo mismo con
el mantenimiento.
https://www.ambito.com/politica/teletrabajo/reglamentan-la-ley-que-dice-el-decreto-n5163920
Daniel Fernandez
Marzo 2021