Usando metáforas que tanto le
gusta a este gobierno, podríamos decir que hay nuevos vientos que anuncian
cambios.
Según las PASO y sin ser
triunfalista, se espera para las elecciones de Octubre una cierta y verdadera
posibilidad de cambio. En la base de la pirámide social y en sectores
subsiguientes, se ha creado una gran expectativa y mucha esperanza, tras años
de desesperanza, frustración e impotencia.
Sólo espero que toda esa
expectativa y esperanza que esta depositando el pueblo en los candidatos
nacionales, provinciales, municipales y dirigentes nacionales y populares,
estén a la altura de las necesidades que el momento reclama y principalmente
para aquellas clases más oprimidas y castigadas por estas políticas
neoliberales. Que la unidad de los sectores populares que se ha producido para
las elecciones sea también para gobernar y programática. En ellos están
depositados el futuro de millones de argentinos, la necesidad de un cambio de
paradigma, un cambio cultural, social y económico que nos lleve hacer un País
libre, justo y soberano. “Que sea esta unión eterna e infinita para que este
pueblo crezca en esa unidad espiritual de las verdaderas y auténticas fuerzas
de la nacionalidad y del orden; que esa unidad sea indestructible e infinita
para que nuestro pueblo no solamente posea la felicidad, sino también sepa
defenderla dignamente. Esa unidad la sentimos los verdaderos patriotas, porque
amar a la patria no es amar sus campos y sus casas, sino amar a nuestros
hermanos”. Juan Domingo Perón.
Se hace necesario un cambio de la
forma de hacer política, a los efectos de abrir al ciudadano la mayor cantidad
de canales de participación real y control de gestión, de lo contrario los
daños a la sociedad y credibilidad serán irreparables y traerán aparejados
conflictos muchos más serios. En esta
nueva etapa, es necesario recrear una democracia mucho más participativa y
directa, donde la voluntad popular sea consensuada y respetada.
De no ser así, la desilusión y el
castigo no se hará esperar y también serán los culpables de que vuelvan a
resurgir estos vendedores de ilusiones falsas, que volverán nuevamente para
saquear y hambrear al pueblo. Ahora se podrá derrotar a Macri, pero no a sus
ideólogos y al modelo, el cual seguirá latiendo agazapado en la oscuridad,
esperando de nuestros errores y desavenencias, para aparecer con nombres y
formatos nuevos. Se debe tener muy presente que si nos equivocamos en esta
nueva oportunidad, podría ser un NUNCA MÁS
para los movimientos nacionales y populares. Porque si los dejamos, volverán
hacer lo mismo una y otra vez. Se debe dar una contundente batalla cultural en
cada sector de la sociedad, si no queremos que vuelvan.
Tras la unidad, algunos nos hemos
tenido que tragar algunos “sapos” en pos de un objetivo superior, que es
derrotar a Macri y terminar con estas políticas, pero no sea cosa que después
los intereses personales o sectoriales sean más fuerte que la necesidad de la
gente y la mezquindad vuelva a florecer, dando paso a la derecha que sabe muy
bien reconvertirse. “Todos los compañeros son importantes y recuerden como se
hace un buen adobe: tierra, agua, paja y… bosta. Todos los elementos son
necesarios. Si quiero llevar sólo a los buenos me voy a quedar con muy poquitos”.
Juan Domingo Perón.
Nada será fácil, dejaran un País
de tierra arrasada, con una inmensa deuda externa y social, con compromisos
financieros que condicionaran y ataran sus decisiones. Se necesitara de mucha
convicción y decisión para torcer el rumbo, hablarle a la gente con la verdad, estar
muy cerca de cada uno, dialogar y escuchar de verdad, no volver a cometer los
mismos errores. Es tanta la expectativa creada, que muchos creerán que de ganar
los Fernández todo se soluciona de inmediato y como por arte de magia, eso será
imposible, por lo tanto habrá que ofrecer soluciones acorde a las
posibilidades. También habrá un sector de la sociedad que avalo y aguanto muchas de las actuales
políticas, pero al próximo gobierno le exigirá resultados inmediatos. Además de
la agresividad de los medios de comunicación hegemónicos y mayoritarios que
pertenecen al poder real, tanto nacional como extranjero, que apoyaron y le
sirvieron de paragua protector al actual gobierno, aunque no pudieron tapar la
realidad, harán resurgir el periodismo de guerra para apoyar las ambiciones de
los ganadores de siempre.
Veo cierto triunfalismo en
algunos sectores y candidatos, como si ya ganaron las elecciones, como que su
estrategia dio resultado y ya no necesitan de “todos”, a no confundirse porque
se puede pagar muy caro.
Solo espero que los ganadores no
se suban a la soberbia obnubilándole el camino que el pueblo les ha marcado, si
la consigna era con “todos”, siga siendo con “todos”. Deben entender que se les
ha dado un voto de apoyo, pero no un cheque en blanco. Lo prometido es deuda.
“El Peronismo solo se puede
manejar mediante una organización que permita la consiguiente descentralización
de funciones, sin lo cual ningún hombre, por activo que sea, puede manejar el
conjunto.” “El que debe conducir el conjunto, debe persuadirse que su misión
inicial es “unir a todos” bajo su dirección, para lo cual no ha de pretender
“mandar” sino persuadir, ya que en la función política no se trata de “un
servicio militar obligatorio”. Mandar es obligar. Conducir es persuadir.” Juan
Domingo Perón
Daniel Fernández
Septiembre 2019
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