El pueblo argentino está
embarcado en un micro que enfila directo al barranco y su conductor no escucha
los reclamos y gritos ante el eminente desastre, solo hace confirmar su rumbo,
aunque el Presidente Mauricio Macri conduce el micro a control remoto y desde
afuera, sabemos que él, su grupo de amigos y beneficiados, son los únicos que
se van a salvar.
Lo que es incomprensible que un
sector de la sociedad, cargada totalmente de despecho, rencor y odio naturaliza
o acepta los desastres sociales y económicos, los han enceguecidos y manipulan su
mente hasta convertirlos en autómatas, repiten como loros los relatos de los
medios y periodistas cómplices: “otra cosas no se puede hacer”, “es por culpar
de la herencia”, “estamos pagando de fiesta”, pero en realidad hace casi tres
años que gobiernan, les han aprobado todas las leyes presentadas, tomaron todas las medidas que quisieron y
tienen los tres poderes a sus órdenes. Todo vale antes que vuelvan los de antes
(populismo), sin querer ver que quienes nos gobiernan son peor que los anteriores.
Los entretienen generando historias sobre lo que hicieron los otros para
ocultarte lo que hacen ellos. Viven obsesionados con el pasado, por y para
rememorar cada uno de los instantes de la película que se proyecta en su
pantalla interior. El ayer ganó espacio al hoy y quedaron atrapados en ese
pasado. El gobierno alimenta y exalta ese odio, revanchismo y confrontación
para poder mantenerse en el poder y seguir con estas políticas destructivas y
de dominación (perdida lisa y llana de nuestra soberanía). Les han corroído
tanto el cerebro, que no les dejaron ni una neurona libre para el razonamiento
crítico, dentro de su egoísmo y enfermizo odio, no se dan cuenta del daño que
están haciendo estas políticas en muchos seres humanos y seguramente personas cercana,
amigos, familiares e incluso a ellos mismos. Nos han empeñado el futuro. Han
perdido la capacidad de poder separar las cosas, de discernir entre el bien del
mal. No quieren al gobierno anterior, está bien, pero no se puede defender al
diablo porque te desilusionaste con Dios. No podes defender a los nazis
por qué no queres a ciertos judíos.
Hay verdades incontrastables: Desde
que asumieron tomaron 132.000 millones de dólares deuda externa. Recibieron el
País con 24.862 millones de dólares y ahora tienen 48.977 millones de dólares
con el préstamo de FMI. O sea, entre lo que recibieron del gobierno anterior y lo
que tienen ahora, han aumentado las reservas 24.115 millones de dólares. Pero
si pidieron e ingresaron 132.000 millones y recibieron del anterior gobierno 24.862
millones, que hicieron con 107.000 millones de dólares restantes que pidieron.
Se fugaron, negocios entre amigos y capitales golondrinas, nada de inversión
genuina. Con este escandaloso ajuste que significa este incremento de los
recursos destinados a los servicios de deuda, la Argentina de Macri pagará lo
equivalente a $ 1,6 mil millones por día, $ 68,3 millones por hora o más de $ 1
millón por minuto en concepto de intereses de deuda pública. Esto es dinero que
le sacara a la salud, a la educación, a la ciencia y tecnología, protección
social, vivienda, trabajo, de las jubilaciones, de los salarios, el “pueblo
pagara su fiesta”. http://lzrsocialypopular.blogspot.com/2018/09/basta.html.
Grecia es nuestro espejo, lleva 8 años
de ajustes tras ajustes, recesión, un desempleo cercano al 25%, la pobreza esta
al 36% y cerca de 400.000 griegos emigraron. El 54% de la asistencia financiera
fue usada para el pago de deuda externa y un 21% se dirigió a la
recapitalización de los bancos. Algunas de las medidas de ajuste que se
destacan: 13 recortes de jubilaciones durante estos 8 años, una baja nominal
del salario mínimo del 20% (que en términos reales sería mayor por el efecto de
la inflación) y la reducción de un tercio del gasto per cápita en salud. Como
consecuencia de la caída del ingreso y del empleo, el consumo privado pasó a
ser el principal impulsor de la recesión, la cual fue mucho más profunda de lo
que habíamos previsto. Este año, el FMI impuso nuevas reformas Grecia: Se
limitó el derecho a huelga, se volvieron a bajar las jubilaciones y se desalojó
a miles de deudores de hipotecas. Por otro lado, los fondos no fueron
destinados a realizar políticas públicas sino que tenían expresa prioridad para
el pago a los acreedores.
Tanto el FMI, como Estados Unidos nos
seguirán prestando dólares o rescates como hacen con Grecia. Para ellos, cuanto
más debamos mejor. Argentina es un país rico en recursos naturales que están
hipotecando. Ya la influencia del Gobierno de Estados Unidos en toda América
Latina es evidente y por medio de sus organizaciones, empresas y fundaciones
que le sirven como tapaderas a las acciones de la CIA, junto a los lacayos
internos buscan erradicar los gobiernos “populares” de nuestros territorios:
Lula, Dilma, Correa, Cristina entre otros. Prestaran muchos dólares para generar
una situación favorable a la reelección en 2019 y accionaran para dividir a la
oposición, en la cual hay muchos “colaboracionistas” y “amigos” de la Embajada
de Estados Unidos disfrazados de opositores se prestaran.
La “justicia” está haciendo su colaboración
a todo esto: Con el tema de los cuadernos, las acciones de la mayoría de las empresas
caerán y serán compradas a muy bajo valor por empresas extranjeras e impondrán
sus condiciones en el mercado laboral. El asunto de los cuadernos desaparecerá
porque está manejado por un juez y un fiscal que mancillan el estado de
derecho, que no buscan justicia sino acciones políticas.
Volviendo a ese sector de la sociedad
que los defiende podíamos decir: el que defiende a un mentiroso es porque es de
su misma condición: Mintieron en la campaña y siguieron mintiendo a los
trabajadores y jubilados: “Tenemos el mejor equipo
de los últimos 50 años". (Nunca aclararon el mejor equipo para qué). "Hagamos
la Revolución de la Alegría". (Nunca avisaron que incluía crisis
económica). "Es maravilloso lo que estamos logrando juntos".
(Inflación, devaluación, endeudamiento, recesión). "Derrotar la inflación
va a ser muy fácil. Si la inflación no baja va a ser responsabilidad de mi
gobierno". (En 2016 dijeron que sería del 25%. Fue del 40%. En 2017
dijeron que sería del 17%. Fue del 25%. En 2018 dijeron que sería del 10%. No,
mejor del 15%. Va a ser mayor al 30%). "No vas a perder nada de lo que ya
tenés". (Que les digan a los 357 trabajadores de prensa despedidos de
Télam o a los 548 del Ministerio de Agroindustria que echaron el viernes, por
citar sólo un par de ejemplos). "El fútbol va a seguir siendo gratis para
todos". (No lo fue. Hoy hay que pagar para ver los partidos). "No
habrá ningún ajuste". (Antes de la crisis de esta semana, el gobierno
quería un recorte de 300 mil millones de pesos. Ahora va a ser mayor). "Los
trabajadores no van a pagar impuesto a las ganancias". (No sólo siguieron
pagando, sino que aumentaron. Entre 2015 y 2017, el número de trabajadores que
tuvieron que pagar este impuesto creció de 1,2 a 2,2 millones). "No vamos
a devaluar". (En dos años y ocho meses el dólar pasó de 15 pesos –valor
más alto que tenía en el mercado paralelo en 2015– a los 39 pesos con los que
cerró el viernes. El jueves llegó a alcanzar los 41 pesos). "Acepto ser
evaluado como presidente si no pudimos resolver la pobreza". (Muy difícil
que apruebe. La única duda es cuánto va a crecer la pobreza. El peor escenario
para el gobierno es que en 2019, pleno año electoral, supere el 33% que recibió
del kirchnerismo). "Haciendo lo que hay que hacer". (Por ejemplo,
aumentar más de 1000% las tarifas de gas y electricidad). "Lo peor ya
pasó". (Mauricio Macri, 20 de julio de 2016. El dólar estaba a 15,80). "Lo
peor ya pasó". (Mauricio Macri, 18 de marzo de 2017. El dólar estaba a
15,84). "Lo peor ya pasó". (Mauricio Macri, 22 de octubre de 2017. El
dólar estaba a 17,75). "Lo peor ya pasó". (Mauricio Macri, 1 de marzo
de 2018. El dólar estaba a 20,41). "La turbulencia cambiaria está
superada". (Mauricio Macri, 16 de mayo de 2018. Ese mes el dólar había
aumentado de 20,80 a 25,50 pesos y el presidente anunciaba con gran seguridad y
confianza el fin de la crisis). "No vamos a pedirle prestado al FMI".
(Le pidieron 50 mil millones de dólares). "El préstamo del FMI es sólo
preventivo". (Mañana el ministro de Hacienda viaja a Washington para que
le adelanten la plata, la necesitan antes de tiempo). "El dólar va a
quedar en 23". (Elisa Carrió, 10 de mayo de 2018. Esta semana denunció
conspiraciones y citó pasajes bíblicos. En cualquier momento escribirá:
"que Dios nos ayude"). "Fui demasiado optimista". (Profunda
autocrítica de Mauricio Macri, 16 de mayo de 2018). "No pasa nada.
Tranquilos". (Mauricio Macri, 14 de agosto de 2018. El dólar subía y subía
y ya alcanzaba los 30 pesos). El Segundo Semestre nunca llegó. Ni la Lluvia de
Inversiones. Los Brotes Verdes se secaron. Tampoco derrotaron al narcotráfico.
Siempre fue una utopía. De pobreza cero, ni hablar. Y de unir a los argentinos,
menos. https://www.tiempoar.com.ar/nota/esloganes
Daniel Fernández
Septiembre 2018
1 comentario:
Estimado Daniel: yo creo que las sociedades contemporáneas funcionan de la siguiente forma: están aquellos que expresan con sus pautas culturales y su condición social a las clases explotadores del trabajo ajeno y ejercen una suerte de lucha de clases unilateral, es decir, reprimen a los luchadores sociales en todas sus formas. Este sector sostienen en TODAS LAS CIRCUNSTANCIAS al gobierno. Dentro de ese sector social están aquellos que aunque no se correspondan económicamente con la clase alta ideologicamente se identifican. Por lo tanto sostendrán a Macri en todas las circunstancias. Luego existe un amplio abanico de personas que son mucho más flexibles en el apoyo a Macri, entre ellos están los desencantados, de modo que entre estos últimos y los que tienen opiniones criticas claras con apoyo a los verdaderos opositores se encuentra la esperanza. Claro que la articulación con las organización electoral dependerá en gran medida de las claras propuestas políticas y éticas de esos opositores. El motor de los próximos acontecimiento estará determinado por la profundidad de la crisis y la inteligencia de la oposición. También es cierto que no alcanza con ganar las elecciones, estas deberían ser solo un paso hacia las transformaciones estructurales, que entiendo deberían ser reformistas revolucionarias, preparando una gran asamblea constituyente con participación central de todos los desposeídos.
Un abrazo
Franco
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